3. Capítulo

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Las semanas pasaron volando.

Exceptuando las miradas de odio, los empujones y el echo de que Rayan Moore le tirara sus libros de vez en cuando, las cosas parecían relativamente "bien"

Eli finalmente se decidió por unirse a un deporte, para tener una experiencia más "normal" en la escuela.

En su defensa, claro que fue idea de sus padres en primer lugar.

Ahora solo necesitaba que firmaran su permiso para llevarlo al entrenador

—¿Judo?.- preguntó Stiles levantando una ceja, mientras veía el formulario

Eli, mezcló su cereal intentando evitar a toda costa la mirada de su tata.

—Bueno, siempre dijiste que me hacía falta algo de resistencia y que tenía que aprender a defenderme por mí mismo.-

Stiles intercambió miradas con Derek

—¿Alguien te está molestando en la escuela, cariño?.- Los ojos de Stiles se volvieron gélidos ante la simple idea

—No...- mintió, no necesitaban saber lo de Rayan —Sólo quiero entrar a un club como todo adolescente de mi edad, tata...- puso los ojos en blanco haciendo parecer que no era la gran cosa

Stiles arqueó una ceja

—Eli, odias todo lo que tenga que ver con ejercicios intensos.- Derek intervino igual de escéptico

El chico gruñó con más indignación —Papáaaas ¿Me darán el permiso o no?.- se quejó alargando las palabras —Estoy intentando construir una nueva vida aquí, tal y cómo ustedes querían, no les pido mucho, sólo ésto...-

Eli los observó con sus poderosos ojos de cachorro y un puchero haciendo juego, sabía que estaba jugando sucio, pero ni modo.

Derek volvió a mirar a su esposo quien al parecer, tampoco tenía idea de que mosca le había picado a su niño, pero finalmente decidieron que no hacía ningún daño que le firmaran el permiso.

—Gracias, gracias, gracias.- los abrazó y se fue volando después de que ambos firmaron el permiso

Sospechaban que su apuro era para evitar que cambiaran de parecer... O hicieran más preguntas.

—Der, tu hijo es un rarito.- Stiles negó levemente la cabeza con una sonrisa ladeada mirando en dirección hacia donde se había marchado el adolescente a toda prisa.

Derek lo abrazó desde atrás, colocando sus manos posesivamente sobre su cadera y repartiendo una seguidilla de besos en su nuca y cuello.

—Te recuerdo que es Nuestro.- corrigió

Stiles movió más su cabeza para darle más acceso a su piel.

—Es verdad... Es nuestro lindo bebé milagro que ahora es un adolescente un poco extraño...- repitió Stiles, añadiendo lo último con una risita divertida.

—¿Recuerdas lo pequeño que era la primera vez que lo tuvimos en brazos?.- Derek besó su mejilla

—Si... Fué adoración a primera vista, lo supe desde el primer momento en el que vimos esos hermosos ojitos almendrados, era tan nuestro... Kayla fue una buena madre sustituta, sobre todo teniendo en cuenta que es mi pariente por parte de mi madre, así Eli tendría un pedacito de mí también...-

—Nuestro hijo es tu pequeño clon a esa edad, independientemente que no seas su madre biológica, Stiles...- rió entre dientes mordiendo el lóbulo de su oreja levemente

—Supongo que mis genes son más fuertes que los tuyos, Hale...- se giró deslizando sus brazos alrededor del cuello de su esposo, mientras este permanecía anclado a su cintura, extinguiendo toda distancia entre sus cuerpos, besándole lento y hambriento.

Principe de la Mafia (Sterek)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora