Hard Love

Fragmentos cercanos

¿Por qué?

La cabeza de Ushka daba vueltas y vueltas, con la mente perdida y el cuerpo apoyado en una de las esquinas del laboratorio, miró de reojo a Strayberry, quien sin problemas liberaba a Buttercup de las incontables cuerdas que presionaban su cuerpo y también cómo ella le inyectaba algo en el brazo que al parecer, lo calmaba.

Ushka no sabia qué hacer en esta situación, si quedarse con ellos o, ¿Ver a Masacrik?pero, ¿Por qué? ¿Por qué todavía pensaba en ese tipo? Hace unos minutos, incluso él pudo haberla matado y aún así...

-Oye, ven aquí, Buttercup quiere decirte algo.

La voz de Strayberry la devolvió a la realidad, aturdida caminó hacia ellos, vio como Buttercup poco a poco se veía mejor sin la suciedad manchando su cara o las múltiples correas marcando sus brazos y piernas.

-Ushka...

-Basta, no te esfuerces demasiado -Le interrumpió Strayberry enfatizando molestia en su tono.

-Él me contó todo, se preocupó mucho por ti, todo el mundo gira en torno a ti al parecer -Suspiró-pero no vine a discutir, espero que no estés en nuestra contra...

Strayberry se hizo a un lado, y Buttercup se levantó de la camilla.

Ushka lo miró confundida.

-¿A qué te refieres?

Strayberry la miró con indiferencia.

-Masacrik debe morir...

Ushka se congeló en ese instante, sólo la miró sin decir nada.

Por otro lado, Buttercup se apoyó por el hombro de Strayberry y se dirigió a Ushka de la forma más seria posible.

-Si llamamos a la policía, Masacrik sabrá como escapar, es por eso que, es mejor matarlo y que mejor forma que quemar todo este lugar, ¿No te parece lo mejor? Vendrás con nosotros, y tendrás una vida nueva, una mejor vida.

Ushka retrocedió un paso, eso no podía ser, no podía creerlo, Masacrik siempre estuvo con ella, tal vez no de la mejor forma pero, ¿Por qué todo debía terminar así?

Sin que más que decir, Ushka salió espantada de la habitación y empezó a buscar a Masacrik por todas partes, al mismo tiempo que Strayberry la perseguía.

El rostro de Buttercup ahora se había transformado en molestia y al mismo tiempo, con la determinación suficiente para cumplir sus palabras. Sin perder el tiempo, puso manos a la obra y abrió uno de los depósitos que tenía Masacrik, en el que guardaba botellas de gasolina que usaba en sus anteriores experimentos, ahora usadas por él para rociar todo la casa.

...

-¿¡Dónde estás, maldita mocosa!?

El grito de Strayberry zumbó en los oídos de Ushka, quien se movió con sigilo para hacia la cocina para no ser atrapada, debía encontrar a Masacrik y sacarlo rápido de la cama, el olor a humo ya empezaba a manifestarse en la fosas de Ushka y el tiempo se acababa.

De repente, escuchó pasos, así que, tomó una decisión, abrió uno de los cajones para agarrar un afilado cuchillo y se metió debajo de la mesa. Las pisadas, cada vez más pronunciadas, finalmente llegaron a la cocina y Ushka mantuvo silencio en todo momento.

-¿Sabes algo? Estoy harta, estoy cansada de ser la segunda opción de todos, ¿Me estás escuchando? -La voz de Strayberry reflejaba un odio masivo-. ¿Por qué no sales y terminamos con esto? Podría decirle a Buttercup que fue un accidente...

El desconcierto de Ushka de hizo presente, ¿A qué se refería? ¿Por qué sus palabras sonaban a una amenaza?

-Oh, tranquila, Buttercup estará bien, le diré que te resististe y no tuve de otra, al fin y al cabo, muerta te verías mejor.