Jeff estaba acostado en la cama, su mirada se desplazaba por la pantalla de su celular con un aire de aburrimiento mientras escuchaba el ruido del agua corriendo en el baño.
La foto que Force le había enviado le hizo sonreír, mostrando a Neo cargando a Tian con la divertida leyenda: "le haré unos trillizos".
La imagen lo hizo pensar en cómo Force había insistido en que él y Neo se encargaran de su cachorro y cómo se despidió con "diviértete" junto a una enorme sonrisa.
Jeff se preguntaba si Force estaba bromeando o si había un fondo de verdad en sus palabras. Salió de sus pensamientos cuando vio la puerta del baño abriendose.
Cuando vio a Ta saliendo lentamente del baño, sintió una oleada de excitación que lo hizo soltar un respiro profundo.
Su Omega, con su cabello aún húmedo, se deslizaba hacia él con un aire de sensualidad que encontraba irresistible.
A Ta le encantaba cómo su alfa se mantenía relajado en casa con solo un par de shorts holgados, dejando al descubierto sus músculos tonificados que, sin duda, disfrutaba recorrer con la vista y, a veces, con las manos. Pero hoy, Ta tenía un plan más audaz.
Amor, dime cómo me veo- preguntó Ta con un tono suave y juguetón, que hizo que Jeff apartara la vista de su celular y mirara hacia él.
Jeff se quedó sin aliento al ver a su hermoso Omega luciendo la bata de baño blanca que acentuaba su piel radiante. El aroma dulce y embriagador de Ta se hacía más intenso, haciéndolo sentir cómo su lado alfa despertaba con una fuerza que apenas podía contener.
Amor, te ves hermoso- murmuró Jeff, su voz cargada de deseo mientras su mirada se posaba en Ta, quien respondió con una sonrisa seductora.
Ta se acercó más a Jeff, y su sonrisa se hizo más amplia mientras dejaba caer la bata lentamente, revelando su cuerpo desnudo.
El gesto de Ta era una invitación clara y tentadora. Jeff observó cómo la bata caía al suelo, mostrando cada detalle del cuerpo de Ta sus pechos suaves y firmes, la curva sensual de su cintura y las largas y esbeltas piernas que parecían llamarlo a explorarlas.
El momento en que la bata tocó el suelo, Jeff soltó un gemido ronco. Su verga se endureció al instante, la visión de Ta completamente desnudo era demasiado para él.
El cuerpo de Ta estaba justo frente a él, su piel resplandeciente a la luz suave del cuarto, invitándolo a recorrer cada centímetro con sus manos y labios.
Jeff sintió cómo su necesidad se intensificaba, entendiendo que Ta había entrado en celo y que lo único que podía hacer era complacerlo completamente.
Eres bello amor- dijo Jeff, sus palabras apenas un susurro, mientras se acercaba a Ta.
Su mirada estaba fija en el hermoso cuerpo de su Omega, admirando cada detalle. El deseo en sus ojos era evidente mientras sus manos comenzaban a explorar la piel de Ta, acariciando suavemente su torso, sintiendo la calidez y suavidad que lo volvía loco.
Ta respondió con un gemido bajo, su cuerpo arqueándose ligeramente hacia Jeff mientras sus manos buscaban el contacto.
Jeff se inclinó, besando el cuello de Ta y dejando un rastro de besos ardientes mientras sus manos se deslizaban por su cintura, acercándolo más.
Cada toque, cada caricia era una promesa de lo que estaba por venir, un preludio de la pasión desenfrenada que pronto los consumiría.
La habitación estaba impregnada del aroma de ambos, una mezcla de deseo y necesidad.
Jeff sabía que esta noche, solo le quedaba complacer a Ta hasta que ambos cayeran exhaustos, satisfechos y profundamente conectados.
Ta se entregaba a él por completo, y Jeff estaba decidido a corresponderle con todo el fervor y devoción que su corazón y cuerpo podían ofrecer.
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Mi Pequeña Familia
RomanceTa está completamente y locamente enamorado de su mejor amigo que haría cualquier cosa por ayudarlo Jeff es padre de un bello cachorro de 6 meses lo ama con locura y es su mayor tesoro aparte de su mejor amigo