Capítulo 1

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"La ambición ha sido siempre un motor implacable, empujando a la humanidad hacia horizontes desconocidos. Desde las pirámides de Egipto hasta las estrellas del cosmos, el ser humano ha buscado dejar su huella en la eternidad. Y en la era de la tecnología, ese anhelo se ha convertido en una obsesión".

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Paredes blanco marfil, ventanas cerradas, adornadas por cortinas de brillante seda. Una lámpara de noche encendida en una esquina y una lluvia implacable en el exterior. Los gemidos y dedos entrelazados resbalaban con el sudor de sus cuerpos, mientras el acto llegaba a su climax.

Los movimientos cada vez eran más rápidos y desesperados y la necesidad de liberarse, asfixiante. Jungkook embestía sin detenerse mientras su compañera le exigía más...

— Más fuerte, más duro, más rápido. Por favor, Jeon.

— Tienes que callarte — dijo a penas en un jadeo — cuando me presionas no puedo concentrarme.

— Estoy a punto de correrme. Necesito más.

— Sí no haces silencio no podré — las gotas saladas bajaban desde su frente hasta sus ojos, haciéndolos arder.

— Dámela, dámela y déjame tener mi orgasmo — suplicó, restregándose en contra de él — Jungkook.

— Lo siento — se detuvo — se volvió a bajar.

So-hee salió de la cama, maldiciendo en voz alta, mientras buscaba algo en el closet sin dejar de quejarse — Estoy cansada de esta mierda. Es agotador tener que pedirte que termines, es agotador gemir y actuar sexy tratando de que eso te motive y puedas follarme bien. Pareciera que ya no te gusto y para perder una hora tratando de tener sexo contigo, prefiero meterme en el baño y masturbarme yo sola.

— Cariño... — la siguió — espera.

— ¿Es eso? ¿Ya no te gusto? ¿O hay alguien más?

— No hay nadie más y claro que me gustas. Es solo que estoy muy estresado por el proyecto y odio follar cuando lo hacemos por obligación. Me gusta cuando es espontáneo y estamos ansiosos los dos. Lo sabes, y sabes también que te quiero.

— Cuando nos hicimos novios tenias una erección con solo besarme y ahora ni estando desnuda y abierta de piernas logras mantenerla. Trabajo en la misma mierda que tú y aun así, saco tiempo para atenderte y mis ganas de hacer el amor siguen intactas. Me gustas, me calientas y te deseo pero mi autoestima se va al piso cuando siento que te tengo que rogar para que te corras.

— No es así.

— Vete al diablo — se encerró en el baño después de dar un portazo. Jungkook se pasó las manos por el pelo y se sentó en la cama. Buscó un video porno en el móvil y se tocó hasta tener una nueva erección. Al conseguirlo, rápidamente llamó a la puerta, siendo abierta con un gesto de mal humor.

— Estoy listo — mostró su dureza.

La mujer puso los ojos en blanco y se arrodilló para tomarlo en su boca. El pelinegro cerró los párpados tratando de concentrarse pero en un momento, su pene volvió a bajar — ¿Para esto viniste?

— No sé qué pasa — exhaló, retirándose para recoger su ropa y vestirse.

— ¿Y te vas a ir? — la molestia dominaba su tono al hablar.

— Perdón — tomó las llaves de su carro y salió del departamento. Las gotas golpeaban de forma salvaje los vidrios y las llantas levantaban el agua en la carretera — ¿Qué demonios me pasa? — azotó el volante.

  El garaje fue abierto dándole la bienvenida a su casa. El calor acogedor lo hacía sentir menos frío pero la soledad le daba una bofetada de realidad. Su relación con So-hee comenzó hace dos años. Ambos científicos gubernamentales, atractivos y exitosos. Todo parecía ir bien hasta que empezó el proyecto "Elysium". Llevaba noches sin poder dormir y días sin siquiera comer. Debía presentar un modelo de inteligencia artificial ajustable, que fuese capaz de simular la conciencia humana y todo lo que tenía hasta ahora era...

INTELIGENCIA ARTIFICIAL - KOOKMINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora