Demasiado fácil-kiyotaka Ayanokouji

Capitulo 3

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Capítulo 3

///////// línea de tiempo 1Y4V//////////

POV. Ayanokouji Kiyotaka.

Mientras caminaba hacia mi habitación asignada, noté a varios alumnos que reconocí como pertenecientes a otras clases. Todos parecían estar en busca de sus respectivas habitaciones, probablemente preparándose para el examen especial que Mashima-sensei había mencionado. Observé el reloj: faltaban unos minutos para la hora indicada, por lo que ajusté mi paso para llegar justo a tiempo.

Al llegar frente a la puerta, toqué un par de veces, esperando una respuesta.

"Adelante," escuché la voz familiar de Mashima-sensei desde el interior.

Abrí la puerta y entré. Mashima-sensei, el maestro encargado de la clase A, estaba sentado frente a dos estudiantes que reconocí de inmediato: Sotomura y Yukimura, ambos de mi clase. Sotomura, un otaku hasta la médula, me saludó con un entusiasmo que solo él podía mostrar en una situación así.

"Bienvenido, Ayanokouji-dono."

Solo le asentí en respuesta y camine hacia un asiento vacío al lado de Yukimura, note que solo quedaba un asiento libre a mi lado, parece que seríamos cuatro alumnos, me preguntó si eso sería lo mismo con todos los demás, era probable conociendo el número de alumnos por clase.

Aún que bueno, se que un alumno de la clase A no realizó el viaje por lo que ellos tienen un alumno menos con respecto al resto de las clases, eso será algo importante, lo dudo, y si lo es solo afectará a la clase como la reducción de 30 puntos que sufrieron en el examen de la isla por su in asistencia.

"Esperemos unos minutos más, aún falta un alumno." Mashima-sensei no dijo.

Observe el reloj de la habitación y vi que ya era la hora acordada, aún que parecía que al sensei no le molestaba esperar un poco más.

Poco después alguien llamó a la puerta y Mashima-sensei, le dio la misma respuesta que a mi. "Entre."

"Permiso." Una voz se oyó y el último miembro de nuestro grupo se unía. Era Karuizawa Kei la que ingresó al cuarto y se sentó en la silla junto a mí.

Vaya ironía del destino, después de reencontrarnos en esta preparatoria, nunca habíamos estado tan cerca, de echo no habíamos intercambiado palabra alguna. Nuestros ojos se encontraron en un breve y eléctrico momento, y en ese instante, Karuizawa, la chica que siempre había irradiado una aura de superioridad y confianza, reveló una mezcla de emociones en su mirada. Le resultó imposible sostener mi mirada, así que apartó sus ojos de los mío y a esta acción yo los cerré por un momento, permitiendo que los recuerdos de una conversación grabada en mi memoria afloraran. Unas pocas palabras, pronunciadas en un momento crucial, habían cambiado el curso de la vida de los cuatro en ese lugar, y ahora, en este momento de tensa proximidad, todo parecía volver a la superficie.

"Oye kiyotaka, te gustan las zanahorias." Yuki que estaba sentado frente a mi me preguntó, algo extraño en ese momento.

"A mi no me gustan." Shiro que estaba sentado a lado de Yuki fue quien respondió.

"A mi no me gustan la mayoría de las verduras." Karuizawa que estaba sentada a mi lado también había respondido en voz baja.

"No importa si es de su gusto o no, lo importante son los nutrientes que obtienes de ellos." Yo quien a principio había decidido ignorar la pregunta había respondí.

Esas simples palabras de Yuki habían cambiado por completo las cosas.

"Eh... ¿por qué están solo estos y los demás por que no están aquí?." Karuizawa preguntó sacándome de mi ensoñación.