Capítulo 130

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La sociedad sin el príncipe heredero y la emperatriz era pacífica. Además de eso, mi vida social era más cómoda ya que Livya estaba de mi lado.

"¿No estás comprometida?"

"¿Compromiso?"

Miré a Livya en blanco y luego al darme cuenta.

"Verdad, normalmente hay un compromiso..."

No lo he pensado porque no me resultaba un concepto muy familiar.

"Supongo que tengo que pensar en ello..."

Sin embargo, tenía dudas sobre si Sigren también tenía un compromiso o matrimonio en mente. Esto fue algo de lo que nunca hablemos y él nunca lo mencionó.

Livya murmuró. "Lady Fiona siempre está relajada de muchas maneras".

Me reí torpemente. En lugar de relajarme, simplemente no pensé en eso porque no hace mucho estaba considerado si rompería con él.

"No hay nada urgente".

Bueno, mi consideración era que Abel no había venido a la capital. Fue el padre que estableció un toque de queda que prohibía a la gente visitar la mansión Heilon después de las 8 de la noche. Entonces, si de repente anunciara que 'yo' me estaría comprometiendo, no podía imaginar qué tipo de reacción saldría.

Sin embargo, lo curioso fue que Sigren realmente siguió el toque de queda. Era un príncipe, podía hacer lo que quisiera. Si decidiera venir después de las 8 de la noche, nadie en la mansión podría controlarlo. Pero siguió fielmente las reglas. De hecho, me pregunté si hizo eso porque escuchó a Abel. Pensando en estos dos hombres, no pude evitar sonreír. Personalmente pensé que su relación era un poco divertida.

Si Sigren se casara conmigo, ¿Abel sería su suegro? Espera... Creo que primero debería preguntarle a Sigren si estaría de acuerdo con este hecho.

De todos modos, la conversación con Livya me dio un nuevo problema en muchos sentidos. Todavía estaba pensando en ello incluso cuando llegué a la mansión.

Parecía que se trataba de una cuestión importante, sobre todo porque nos hemos confirmado los verdaderos sentimientos del otro.

¿Pero cómo diablos se suponía que sería el compromiso? Nunca le he hecho, así que realmente no pude sentirlo.

"¿Cómo te comprometiste?" Pregunté mientras estampaba los papeles de vacaciones de Isaac.

Isaac aceptó cortésmente los papeles pero parecía angustiado.

Este hombre conocería a su esposa, pero ¿qué pasaba con esa expresión?

"Pensé que debería pensar en ello".

"¿Propuso su Alteza?"

"No".

Mmm... proponer, ¿no era una esperanza demasiado grande?

Isaac hizo una cara aliviada.

"Entonces solo espera".

"¿Está bien?"

Recordé que Isaac era el subordinado de Abel. Estaban confabulados, ¿no?

"Si, él y debería proponerle matrimonio, señorita".

"¿Si no lo hiciera?".

"Bueno, considerando la personalidad de la Señorita, creo que esa persona debe haberse estado preparando para sujetarte más fuerte, señorita".

Bueno, eso fue un problema. Teniendo en cuenta lo que pasó la última vez, no estaba seguro de si haría eso. Más bien, era muy probable que fuera yo quien tuviera que retenerlo.

Isaac luego dijo con calma. "Creo que, para una dama que no pudo quedarse quieta, él es la pareja perfecta para usted, señorita".

"¿Eso es lo que piensas de mi?"

"Señorita, eres tú quien ha estado en Heilon durante años y te fuiste sin siquiera mirar atrás".

"Espera, ¿todavía están molestos por eso?"

"Ah... Definitivamente, señorita. Por supuesto, como todos somos adultos, no lo hacemos obvió".

Isaac entrecerró los ojos.

"Pero, sea honesta señorita, si no tenía una relación con Su Alteza, no tenía intenciones de quedarse aquí, ¿verdad?"

"¿Supongo que sí?"

"¿Ve? Señorita, tengo razón, ¿no? Como era de esperar, estar en una relación es realmente el único movimiento apropiado que el Príncipe Sigren podría hacer para aferrarse a ti con fuerza".

Añadió con calma Isaac.

"Bueno, esto es bueno. Nos sentimos aliviados de que la persona que tanto te ama se convierta en tu esposo, Señorita".

Espera un segundo, estoy un poco confundida. Entonces, ¿sólo tengo que hacer bien mi trabajo?

Isaac se encogió de hombros.

"Aunque, sinceramente señorita, para alguien de su nivel, es normal cambiar de pareja más de una vez. Así que señorita, no se preocupe por eso".

Ah, creo que también escuché esto de Livya.

Asentí y empujé a Isaac sobre su espalda.

"Está bien, gracias por la respuesta. Ahora, vuelve con tu esposa".

Isaac agitó sus papeles de vacaciones.

"La Señorita es la mejor".

"Estás diciendo lo obvio. Entonces, guardarás lo que pasó esa vez como un secreto para Abel, ¿verdad?"

Isaac sonrió.

"Señorita, no hay manera de que pueda ocultar eso al Maestro".

"Devuélvelo".

"Adiós señorita".

Isaac salió de mi oficina en un instante.

Hice clic ligeramente en mi lengua.

Así, se confirmó la persistente bomba de Abel. Al parecer, el soborno llamado vacaciones no funcionó.

Qué lástima.

Me convertí en la esposa del protagonista masculinoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora