-Capitulo 20: Solo es momentáneo-

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El sol apenas asomaba por el horizonte cuando Melodie abrió los ojos. La luz matutina se filtraba a través de las cortinas de tu habitación creando un ambiente tranquilo y acogedor. Melodie sonrió para sí misma, recordando la noche anterior. Había conseguido quedarse a dormir en tu casa, un primer paso importante en su plan. Sabía que tenías novia, pero para Melodie, eso no era más que un pequeño obstáculo.

Tu aún dormías profundamente al otro lado de la habitación, tu respiración suave y regular. Melodie te observó por un momento, notando cómo la luz acariciaba tu rostro, destacando tu perfil atractivo. Se mordió el labio inferior, sintiendo una mezcla de determinación y deseo. Sabía que tu eras fiel a tu novia, pero también estaba segura de que podía hacerte cambiar de opinión.

"Solo es cuestión de tiempo", pensó mientras salía silenciosamente de tu habitación. Se estiró y se miró en el espejo, arreglándose el cabello y asegurándose de que se veía perfecta. Sabía que la atracción física era su mayor arma, y no tenía miedo de usarla.

Bajó las escaleras con cuidado, dirigiéndose a la cocina. Allí, comenzó a preparar el desayuno, un gesto que sabía que tu apreciarías, "El camino al corazón de un hombre es a través de su estómago", había escuchado alguna vez, y aunque no creía completamente en ello, sabía que los pequeños gestos de atención eran fundamentales.

Mientras cocinaba, su mente elaboraba estrategias. Tenía que ser cuidadosa, no podía ser demasiado obvia, pero tampoco demasiado distante. Necesitaba encontrar la manera de estar presente en tu vida de una forma que tu novia no pudiera igualar. Quizás podría demostrarte que ella te entendía mejor, que te apoyaba en tus sueños de una manera que tu novia no lo hacía.

Despertaste poco después, sorprendido al encontrar a Melodie en la cocina. "Buenos días", dijiste con una sonrisa, todavía somnoliento.

"Buenos días, ( )", respondió Melodie con su tono más dulce. "Pensé en hacerte el desayuno. Espero que te guste."

Te sentiste halagado. "Gracias, Melodie, no tenías que hacerlo."

"Es lo menos que puedo hacer", dijo ella mientras colocaba un plato de huevos revueltos y tostadas frente a ti. "Quería agradecerte por dejarme quedarme anoche."

Sonreiste y comenzaste a comer, sintiendo que la mañana se desarrollaba de manera agradable. Sin embargo, en el fondo, algo te inquietaba. Sabías que Melodie era una chica atractiva y encantadora, pero también conocías sus tendencias egocéntricas. No podías evitar pensar en tu novia y cómo reaccionaría si supiera que Melodie estaba en tu casa.

A medida que avanzaba el desayuno , Melodie se las arregló para estar cerca de ti, buscando cualquier oportunidad para estrechar su vínculo. Mostro un interés genuino en tus hobbies y compartiendo risas y anécdotas. Sin embargo, cada vez que la imagen de tu novia se cruzaba en tu mente, Te sentías culpable. Sabías que amabas a tu novia y que no querías hacer nada que pudiera lastimarla.

A medida que pasaban las horas, Melodie se dio cuenta de que no cederías tan fácilmente. Pero eso solo la motivó más. "No me rindo fácilmente", se recordó a sí misma. Sabía que debía ser paciente y persistente. Tu no eras un chico común, y ella no era una chica que aceptara un 'no' como respuesta.

Después de terminar el desayuno y ordenar la cocina la acompañaste hasta la puerta, Melodie te miró directamente a los ojos. "Gracias por todo, ( ). Me la pasé muy bien contigo."

Sonreíste sintiendo una punzada de culpabilidad. "Yo también, Melodie. Cuídate, ¿sí?"

Melodie asintió y, antes de irse, te dio un abrazo. Un abrazo que duró un poco más de lo necesario, lo suficiente como para que tu sintieras el calor de su cuerpo y su perfume se quedara en tu mente.

Cuando Melodie se alejó, una sonrisa se dibujó en su rostro. Sabía que había sembrado una semilla en tu mente. Ahora, solo tenía que esperar y continuar con su plan. Sabía que no iba a ser fácil, pero no había nada que Melodie deseara más que ganar este juego. Y para ella, todo era un juego en el que solo podía haber un ganador.

Tu día transcurrió con normalidad, llegando la noche, Janeth fue a tu casa. Tenía planes de pasar tiempo juntos, como solían hacerlo los fines de semana. Cuando ella llegó, la recibiste con un abrazo fuerte y un beso tierno, tratando de borrar cualquier rastro de la inquietud que habías sentido por Melodie.

"Te extrañé mucho", le dijiste mientras la mirabas a los ojos.

"Yo también, amor", respondió Janeth, acariciando tu mejilla con cariño. "¿Cómo fue tu día?"

vacilaste por un segundo, pero decidiste no mencionar a Melodie. No querías preocupar a Janeth innecesariamente. "Fue un día tranquilo, nada fuera de lo común."

Pasaron la tarde juntos, cocinando, viendo una película y hablando sobre sus planes para el futuro. Sentias que todo estaba volviendo a la normalidad. Janeth te hacía sentir en paz, y esa era una de las razones por las que estabas tan seguro de tu amor por ella.

Cuando la noche cayó, se acurrucaron en el sofá, Janeth apoyada contra tu pecho. El ambiente era cálido, y el silencio entre ustedes era cómodo, lleno de confianza y afecto. Eventualmente, las caricias se volvieron más íntimas, y pronto se encontraron compartiendo un momento de pasión que los unió aún más.

Después de la intimidad, Janeth se quedó dormida en tus brazos, con una sonrisa de satisfacción en el rostro. La observaste mientras dormía, sintiéndote afortunado de tenerla a tu lado. Sabías que ella era la mujer con la que querías pasar el resto de tu vida.

Sin embargo, en la oscuridad de la habitación, sus cuerpos desnudos generaban un calor reconfortante y mientras los latidos de tu corazón se calmaban, la imagen de Melodie cruzó por tu mente. Su perfume, su risa, la forma en que te había mirado... Cerraste los ojos, intentando apartar esos pensamientos. Te repetiste a tí mismo que amabas a Janeth y que no podías permitir que nadie se interpusiera entre ustedes.

Pero algo en tu interior te decía que Melodie no iba a rendirse tan fácilmente.....

Continuara.....

-¿Esto es Amor? - Janet x Lector- Brawl StarsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora