𝟎𝟏. nuevos comienzos...

1.6K 131 104
                                    


Lara García. 6:30 a.m

Que puto sueño.

Me acababa de despertar, tenia el tren a Barcelona en dos horas, y tenía que ducharme y terminar de hacer la maleta, porque si, soy un desastre y las hago a última hora.

Mi última semana en Madrid había sido maravillosa. Me había despedido de algunos amigos, había hecho planes guays con mis padres, y ahora tocaba la peor parte. Las últimas despedidas.

Me levante de la cama y fui directamente a desayunar, mis padres se habían despertado también para ir a despedirse de mi, por lo que mi madre ya me había hecho el desayuno cuando bajé.

no se como tiene tanta energía por la mañana la verdad.

Buenos días mami.—Dije mientras me sentaba en un taburete de la isla de la cocina.

—Buenos días cariño, nerviosa?.

Se sentó a mi lado con una sonrisa.

De repente mi mente hizo click. No recordaba que hoy me iba. Aún estaba más dormida que despierta.

—Si te dijera que no te mentiría.

Sonreí nerviosa.

Poco después, bajo mi hermana con mi padre. Mi hermana iba andando con los ojos cerrados.

—Tengo sueño.

Balbuceó frustrada. Esbocé media sonrisa.

La iba a echar muchísimo de menos, hasta sus berrinches mañaneros.

Mi padre y mi hermana se sentaron a desayunar y cuando acabé subí rápidamente a cambiarme. Me puso un pantalón de chandal corto gris, ya que ya empezaba el calorcito. Lo combiné con una camiseta de manga corta blanca. Me deje el pelo suelto y pasé de maquillarme, no me iba a ver nadie en el tren. Cuando acabe, me mire en el espejo de mi habitación y suspiré. Estaba muy nerviosa. Y si no iba bien? Y si no daba todo de mi misma? Y si mi esfuerzo no era suficiente? Los miedos empezaban a carcomerme como siempre que tenía que hacer cualquier cosa que se salía de mi zona de confort. Cuando quise darme cuenta, mi padre se asomó a llamarme.

—Lari, nos vamos?

le miré y asentí.

—Vamos.

Me regaló una sonrisa y los dos bajamos abajo, mi padre llevaba mi maleta. Cuando baje, mi hermana ya estaba llorando.

—Pero Blanquita, no llores que me pongo muy
triste!—Dije acercándome a ella y poniéndome de rodillas para estar a su altura.

Mi hermana se tapó la cara con las manos.

—No quiero que te vayas—Dijo en un tono y triste y algo tartamudo por las lágrimas.

Mi corazón se apretó un poco en mi pecho y la abracé.

—Me vas. seguir viendo un montón corazón, no te preocupes vale?

Después de un rato, mi hermana asintió y me devolvió el abrazo.

⭑ ⭑ ⭑

Estábamos aparcando en la estación y yo ya notaba como las piernas me temblaban de nervios.

¿Por que tenia que ser tan sensible a todo?

Bajamos del coche y llegamos hasta una puerta la cual mis padres no podían cruzar, ya que daba directamente a las vías.

Suspiré y me gire hacia ellos. Abracé primero a mi madre, que también lloraba.

𝐒𝐎 𝐈𝐓 𝐆𝐎𝐄𝐒 ; lamine yamal.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora