Tío eres mi obsesión

Capítulo 6: Ella es una Brown

Marina ha recorrido varias dependencias y se ha presentado con los encargados como la nueva asistente del CEO y también como aprendiz del mismo. Ante esto ha encontrado a hombres muy dispuestos a servirle de guía no sólo en la empresa, sino en la ciudad y ha encontrado la mirada recelosa de algunas mujeres tanto por su aspecto como por su nuevo cargo. Al parecer muchas de ellas suspiran por su máximo jefe y desde luego, esto a ella le divierte.

Así que esto último no molesta a Marina, por el contrario, en su mente las felicita por tener tan buen gusto, pero a su vez se disculpa con ellas, porque por el momento piensa acapararlo por completo.

Transcurren algunas horas mientras realiza el recorrido, en las cuales ha conocido a personas amables otras no tanto y ha compartido sus datos de contacto con algunos de los jefes de área y empleados que piensa podrían ayudarla en el futuro. Incluso almuerza en la cafetería de la empresa y estrecha lazos con algunos compañeros de trabajo. Marina es una persona muy sociable y puede hacer amigos con facilidad, aunque la mayoría de éstos siempre son hombres, al parecer algunas mujeres se sienten un poco intimidadas por ella. Pero, esto es algo que jamás le ha preocupado.

En medio de esta buena interacción social su teléfono cobra vida.

—Boa tarde —contesta.

— ¿Dónde estás? —pregunta Axel con gran interés.

—Unos compañeros me han invitado a almorzar y ahora estoy en el área de contabilidad recibiendo una inducción de uno de ellos.

—Eres bastante hábil y sociable... ¿te demoras?

—No si me necesitas, incluso puedo correr para llegar hasta ti.

Él ignora la dirección de su respuesta y más las posibilidades que ofrece.

—Debo ir a una reunión y después iré a la casa, así que le pediré al chofer que te lleve, yo llegaré tarde, no me esperes para cenar.

Su tono determina distancia, una que al parecer quiere recuperar. Ella lo pasa por alto.

—Ok, entonces después de las inducciones que me han ofrecido iré a casa.

—Está bien —corta la llamada.

Marina lo ha sentido distante a través de la línea, por lo cual está segura que debe estar aprovechando cualquier oportunidad para huir de ella. Sin embargo, después de lo sucedido en la mañana también está convencida que no podrá continuar negando que la desea. No obstante, planea no acosarlo demasiado, lo dejará recomponerse un poco para no atormentarlo más de lo necesario.

¿Debo decirte que soy adoptada para que cedas o aun diciéndote eso me rechazarías porque sigues siendo legalmente mi tío? No lo sé, pero pronto te disfrutaré querido Axel.

—Marina, eres increíble, no sólo tienes buena apariencia, sino que también eres inteligente, captas todo muy rápido —afirma Brian, un joven y guapo administrativo del área de ventas del departamento comercial.

—La verdad no sé si agradecer tu comentario o cuestionarte por tu sorpresa.

— ¿Por qué?— indaga con asombro.

—Porque la sorpresa indica que asumes el estereotipo de dice que la belleza no está unida a la inteligencia, lo cual también significa que para que alguien tome en cuenta lo que una mujer dice, no debería verse bonita — cuestiona con una ceja alzada.

—No, no, discúlpame tienes razón, no lo había pensado de esa forma —parece un poco apenado

—No te preocupes, sólo te estoy molestando, entiendo lo que querías decir —ríe divertida.