Bienvenidos a la escuela Salvatore

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An.

¿Esto acaba de pasar? O si, por supuesto que sí, todo mi cuerpo está desbordando felicidad, en primer lugar mi amor de toda la vida me acaba de hacer el mejor oral del mundo, y el único para ser más precisa, además de que e pasado la mejor de mis tardes a su lado.

"Todo un sueño"

Otra cosa importante a resaltar es que le e dejado claro que se que algo trama con todo esto, me lo confirmo cuando delante de la presa afirmó que era su novia, cuando no habíamos hablado nada de eso, pero todo lo que dije era verdad, no me importa lo que él obtenga de esto si con eso yo lo obtengo a él, en fin, es un ganar, ganar, aunque no entiendo muy bien eso de que el gana más de una ves, y realmente no me quiero esforzar mucho en entender.

Intento ser yo cuando estoy a su lado, no me es muy difícil, e convivido con él toda mi vida, bueno, mejor dicho coexistido, Enzo no es mucho de convivir, es más de prestarle su existencia al mundo, estar allí sentado como un mueble con expresión sombría y apenas pronunciando palabras, pero existen momentos que se desenvuelve mejor, cuando pelea, en el campo de entrenamiento siempre es un maestro, me gusta asistir a sus peleas, es como ver a un artista pintar o esculpir, lo disfruta tanto que tiende a sonreír en medio de la contienda.

"¿Pasatiempo favorito? Observar a Enzo Salvatore"

Después de ir a comer la noche lleno por completo a la zona así que es hora de volver, Enzo tiene cosas que hacer, mientras yo tengo que irle a contar a mi fiel amigo lo que a pasado, por supuesto que con lujo de detalles, así que no me sorprende cuando visualizo el edificio Salvatore. Bajamos de la camioneta y lo primero que siento es el pelaje y el calor de una enorme bola de pelos negra.

------¡Hola Max! ¿Quien es la cosa más tierna en este mundo? ¡Tú! Que lindo mi amor.

Le hablo como si fuera un bebé para acariciarlo y darle amor, Max está parado en dos patas, así que todo mi cuerpo está cubierto por su pelaje, parece un oso junto a mi, como puedo logro que tome asiento así puedo tomarlo del hocico y darle un pequeño beso.

------Sin duda eres mi favorito.

Digo provocando un ladrido de su parte, la cola de Max serpentea de felicidad en el suelo, siento un cuerpo duro pegado a mi cuerpo, estoy un poco inclinada asía adelante, se me había olvidado por un momento que tenía vestido y una vagina al aire.

------Ten cuidado con lo que enseñas dulzura.

Su voz me eriza los bellos de la nuca, me acomodo el vestido antes de girar para despedirme.

-----Lo siento... Ya debo irme.

No se qué más hacer así que tengo planeado simplemente alejarme, cosa que no le parece ya que me mira con una ceja alzada.

"¿Porque yo no puedo alzar una ceja?"

Enzo se inclina para quedar a la altura de mis labios y robarme un beso, no es como el del bosque, este es más calmado aunque igual de territorial, tengo la teoría que no podré disfrutar de otros labios que no sean los suyos, cuando se separa de mi y se endereza estoy en las nubes.

------A partir de ahora cada ves que te despidas de mi debe ser así.

Tuerso los labios.