Cherry Enemy || Sonic Prime x Oc

Prólogo

"Green Hills es un maravilloso lugar para vivir, pero eres tú quien lo convierte en un hogar, tu hogar"

Si cada vez que alguien me haya expresado semejantes palabras yo recibiera una moneda, mi riqueza sería insignificante. Solo una sola persona ha demostrado tal preocupación por mí y no es algo que este dispuesta a escuchar.

La concepción de "hogar" se me hace altamente subjetiva. Cada persona tiene su definición única: Una casa cómoda, la naturaleza acogedora o los amigos que están para ti en los días malos.

Para mí, un hogar es un lugar donde nadie puede dañarte, donde ninguna amenaza física o emocional te invada, un espacio donde la seguridad y la protección reinan.

Y siento demasiado miedo en las noches como para considerar a Green Hills mi hogar.

No le temo a la noche por su oscuridad, sino por lo solitaria que se siente. No puedo ver ni percibir a nadie a mi alrededor. Tampoco tengo a alguien a mi lado, salvo a Clover. Sin embargo, admito que la posibilidad de sentir el cálido abrazo de un hogar sería algo extremadamente hermoso.

Y yo me encargaré de conseguirlo.

Quizás te preguntes quién soy y por qué narro mi propia vida. Yo misma he luchado con ese dilema durante mucho tiempo.

No te agobies, tengo un nombre, una meta y múltiples lugares donde refugiarme de las noches frías. Nunca me quedo en un mismo sitio por mucho tiempo, pero no estoy convencida de que esa sea la razón por la que no creo tener un hogar, sino más bien por el nulo apego que siento hacia el lugar donde vivo.

Green Hills. A donde quiera que dirijas tu mirada, el color verde domina el paisaje. Las personas suelen ser amables, y eso es lo que más detesto. Es un sitio agradable para vivir y los árboles son encantadores, pero no pelearía por él, ni siento un verdadero apego emocional.

Podría decir que soy bastante famosa por aquí. Eso no siempre implica algo bueno. La gente no se aglumera para solicitar autógrafos o fotografías cuando me ven, porque otros son famosos por sus heroicas hazañas, reveladores descubrimientos o talentos innatos. Yo soy conocida por ser una enemiga pública.

No me inquieta ni perturba este hecho. He asumido plenamente mi rol y no me arrepiento de quien soy, hasta ahora. Verás, tengo la suerte de saber que si no buscas tu propia felicidad, difícilmente alguien más lo hará.

Para ciertas personas, la felicidad se materializa en compartir un helado con tu pareja o en el calor de la amistad. Blah, para mí, la auténtica dicha radica en el poder absoluto.

Desde que tengo memoria, mis superiores han abusado de su poder contra mí, y eso jamás me hizo feliz. Nunca me hizo feliz que me pisotearan o trataran como basura. ¿Quién lo sería? Y a partir de mis trece años, he emprendido la búsqueda incesante del poder, consciente de que solo así nadie estará a la par o por encima de mí. Podré mirar a todos desde arriba sin miedo a que me lastimen.

Desafortunadamente, cuando estaba a punto de alcanzar mi cometido, fui abruptamente detenida por una tropa de incompetentes: el Team Sonic.

Si tuviera que escribir sobre cuánto los detesto, se acabaría el papel en el mundo. Un grupo de "héroes" conformado por cinco integrantes, cada uno más odioso que el anterior.

Rouge, una murciélago que con su afán por las joyas y el materialismo que posee, no me logra cuadrar que sea una heroína.

Knuckles, un equidna rojo con más músculos que cerebro, tanto que si llegara a usar su intelecto en combate, se acabaría el mundo.

Miles es un zorro que, en mi opinión, no representa las cualidades que se les atribuyen a su especie. Solo es un chico listo que no le importa ser la sombra de los más grandes.

Amy Rose. La considero más competente que el resto, pero eso no quita lo patética que se ve cuando trata de hablar sobre sentimientos todo el tiempo y trabajo en equipo, me resulta ridículamente cursi.

Y cómo olvidar al tonto mas grande.

Sonic The Hedgehog es el líder del dichoso grupo, aunque para mí es como el niño que lleva la batuta en un desfile escolar. Es solo un insensato que jamás concibe un plan y cuyas decisiones precipitadas lo llevan a meterse en problemas más grandes que él. Aun así, no puedo negar que posee la valentía necesaria para ser un héroe, y su determinación para salvar a los demás pese a todo, es muy admirable.

Eso no quita que lo odie.

Todos representan una piedra en mi zapato. Acabar con ellos sería imposible. Es por eso que he fijado la mira en un nuevo objetivo: el prisma paradoja. Con esa piedra en mis manos, obtendré todo lo que quiero sin necesidad de enfrentarme a ellos otra vez.

Estoy dispuesta a todo con tal de ganar. El cielo es mi límite. Con eso conseguiré todo el poder que necesito para estar por encima de los demás.

Para construir mi propio hogar.

Haré lo que sea necesario.