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- Otra vez tarde... Los bailarines llevan minutos esperando -

- Tengo una vida Sungjoo-

- Otra vez con lo mismo...-

- Fuera diferente si no estuvieras sofocandome todo el tiempo, necesito espacio ¿Sabes?-

- ¿ Entonces soy yo el culpable? -

- No dije eso, pero en parte, solo quiero que dejes de presionarme -

- ¡Está es tu responsabilidad! Deja de actuar imprudente, tienes Fans que esperan por ti ¿ Y tú qué haces? Revolcandote con...-

- ¡No te atrevas!- el azabache se levantó de golpe enfrentando a su Manager con una dura mirada y un tono de voz elevado
- No le faltes el respeto a Jeongin o no respondo Sungjoo, hay líneas bastante claras que no puedes sobrepasar, no te conviene.-

El mayor lo miro incrédulo, Hyunjin jamás se había atrevido a hablarle así y es que últimamente las actitudes del menor habían cambiado demasiado,es como si toda la imagen que el mismo se esforzó en construir para el cantante se hubiera esfumado y en su lugar este empezará a actuar por sus propios instintos.

Olvidando completamente que su Manager a estado a su lado por años.

- Ojalá y Jeongin te valore, seria una lastima que lo único que quiera de ti sea lo que tengas para ofrecerle...-

- ¿De que estás hablando? -

- ¿Crees que no se que le compraste un auto? ¡Vamos, Hyunjin! nisiquiera a mi en todos estos años me has dado algo así... Debe tenerte loco ¿No es así? -

- Estás siendo inmaduro, además si lo que insinuas es que Jeongin es un interesado, estás muy equivocado.-

- ¿Y tú cómo lo sabes?-

- Porque lo sé y ya.-

La risa del manager llamo la atención del joven Idol.

- Espero que pienses con la cabeza de arriba Hyunjin, sería una lastima que te dejarán con el corazón roto y la cartera vacía.

El hombre salió de aquella oficina dando un portazo, estaba realmente enojado, tantos años a su lado, tantas noches sin dormir, estuvo en cada éxito, en cada momento de nostalgia, limpió cada lágrima y lo ánimo cuando las cosas salían mal.

Para que de la noche a la mañana el solo desechará todo por alguien más.

Era injusto y demasiado desconsiderado, sin embargo en su mente no podía quedarse de brazos cruzados, porque ellos habían trabajado juntos por años y eso no podia cambiar de la noche a la mañana, porsupuesto que no.

Por otro lado el rubio intentaba comunicarse con su mejor amigo, aún que esté lo enviara al buzón en repetidas ocasiones.

¿Que estaba haciendo?

¿Que era más importante que contestar el bendito teléfono?

Se rindió por quinta vez y suspiro mirando su departamento.

El frío entraba por las ventanas abiertas y la madera rechinaba cuando la brisa soplaba muy fuerte.

No era un departamento lujoso como la casa de Hyunjin, sin embargo el lo pagaba con el sueldo que obtenía en la cafetería, era su departamento y se sentía orgulloso en cierta parte, de tener algo por su propio mérito.

Miro a su alrededor, ese lugar que aún que no fuera el castillo de una princesa, había sido la cueva de Hyunjin y el en incontables noches.

Noches en las que después de hacer el amor, el mayor lo dejaba solo.

Sintió nostalgia y una pequeña incomodidad en su interior, el sentimiento de tristeza lo invadió como un fuerte golpe de realidad.

El solo tenía sexo con Hyunjin.

¿Cambiara eso en el tiempo que viva en la casa del mayor?

Por supuesto que no ¿Cómo iba a cambiar? Han siempre tenía razón, el solo era el polvo fijo del cantante.

Entonces se pregunto ¿Por qué el? Si Hyunjin tenía Miles de Fans y dudaba que el fuera la mejor opción entre tantas personas...

¿Y si lo que tenían era más que solo sexo? ¿Y si tenían algo especial? 

No...

No debía pensar de esa manera, porque su corazón era frágil y podía lastimarse.

Entonces decidió dejar los pensamientos a un lado y empezar a recoger las cosas que necesitaría en los siguientes días.

Además debía tomar una clase de manejo, sacar una cita para obtener su licencia e ir al super para comprar los ingredientes que necesitaria para la cena, sin contar que tenía turno en la cafetería.

Tenía un día ajetreado, no había espacio para sus pensamientos en su agenda.

Fue así como Jeongin empezó con sus deberes, ocupando su mente en tareas y dejando de escuchar los reclamos de su corazón.

Después de dejar sus cosas en la casa del mayor, comer algo rápido y agendar su cita para mañana en la tarde, ya que era su día libre, tomo una ducha y salió de la casa del mayor.

Hyunjin vivía en una urbanización prestigiosa dónde solo personas de clase alta vivían, por eso se sentía realmente incómodo, mientras el caminaba por las calles, ya que estaba seguro que no conseguiría un taxi dentro de la urbanización y si lo hacía la tarifa sería bastante alta, así que decidió salir de la urbanización hacia la avenida.

Sin embargo no contó que en la misma urbanización vivía una curiosa chica que al verlo se sorprendió.

Para nadie era un secreto que Jeongin era un becado, que trabajaba a medio tiempo y que no tenía la misma posición social y económica que el resto en la universidad.

Tanto el como Han al igual que varios estudiantes.

Entonces el verlo en una urbanización tan prestigiosa como esa no tenía sentido, por la mente de la chica pasaron muchas ideas.

Quizás era el prostituto de un hombre mayor que le pagaba por sexo, o un trabajador doméstico, o quizás el tercero en una relacion.

Porque tampoco era un secreto que Jeongin tenía un buen físico y con el podría conseguir cualquier cosa, entonces la sonrisa en el rostro de la mujer creció y decidió vigilar muy de cerca al rubio.

Está era su oportunidad de destruirlo, que volviera a su ciudad y ella volver a ser la mejor de la clase, porque estaba segura que si Jeongin se iba entonces el pelirrojo también lo haría.

Era su oportunidad...

Además no olvidaba aquel hombre curioso que había golpeado a Mike, podía haber jurado conocer ese porte y perfil, pero el hombre estaba todo cubierto, entonces le fue imposible ver más allá que solo su silueta.

Quizás Jeongin escondía algo y ella lo iba a averiguar a como de lugar.

Car's Outside. +18 (Adaptación a Hyunin)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora