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MELODÍAS Y CANCIONES
Dangerous Woman de Ariana Grande

Llevo todo el día haciendo cosas, de un lado para otro, me he levantado a las ocho de la mañana, he salido a correr, también he estudiado, el viernes tengo un examen, me llamaron y fui al taller para ver qué tal va mi coche, también quedé con Alex y Miguel, fui a comprar al Mercadona un plato de pasta para llevármelo y comer en la universidad, los lunes tengo turno de tarde, no hice mucho más porque tuve que ir a clase.

Las clases son eternas pero entretenidas, he llegado a las seis y media a casa, lo único que quiero es darme una ducha y meterme en la cama, la desgracia es que no puedo hacer lo segundo hasta que vuelva, tengo que ir a hacer la canción con el estúpido de turno.
Estoy sola en casa, Kells vendrá dentro de poco, se ha pasado toda la tarde con sus amigas de la universidad.
Yo tengo amigos, no me junto mucho con ellos, nos juntamos para hacer proyectos y luego salir a celebrarlo cuando acabamos, aún así me lo paso muy bien con ellos.

Me envuelvo con la toalla y salgo a mi habitación, frunzo el ceño al ver a Kells y a Ian tumbados en mi cama comiendo unas patatas fritas

—¿Qué hacéis aquí?— pregunto

Me divido el pelo en dos para peinármelo

—¿Que tal con él?— habla Ian

—Vaya, hola, ¿Que tal Narel? Hola chicos, yo estoy muy bien, no hace falta que os preocupéis tanto por mi— bromeo

—Déjate de tonterías y cuéntanos el chisme— me interrumpe Kells mientras se lleva una patata a la boca y hace ruidos extraños

—No sirvo para nada y resulta que solo están colaborando conmigo por algo malo que ha echo Nathan, he llamado a David para que me lo cuente pero no me coge el teléfono

—Uf, si quieres le rallamos su coche

Empiezo a quejarme y andar por la habitación mientras me quejo de Nat

—Es odioso, no para de decir tonterías, es rico y por eso se cree algo, además ¡Es un engreído de mierda! Solo sabe decir "oh, ¿Quieres verme mis abdominales?"— imito su voz grave y sexy— YA SE QUE VAS AL GIMNASIO, no hace falta que presumas tanto, UFFF ME SACA DE QUICIO, ayer por poco no me abre la puerta, quería dejarme en la maldita calle y... todo el rato poniendo quejas a mis canciones, por no hablar "A mi no me llames Nathan, no eres nadie, Soy Nat y soy un gilipollas", va de que me odia pero no para de provocarme, finge que no está por mi pero sigue coladísimo, SUPERALO, así que, por mi— Sonrío con maldad— si le estropeamos su caro coche se quedaría muy corto tenemos que hacer algo más, más malo, que le baje su odioso ego...

—Cálmate fierecilla— sonríen con diversión, se miran entre ellos y luego levantan las cejas mirándome a mi

—¿Qué pasa?

—Y... ¿Y no será que tú tampoco le has superado?— me analizan

—¿Yo?— me escandalizo y me río exageradamente— Por mi como si sale con alguien, me da igual, es más voy a salir yo con alguien, ya es hora. Este se va a enterar de quién es Narel Castilla Lérida

Termino de vestirme, voy a la parada de autobús y otra vez a esperar hasta llegar a su casa. Vuelvo a poner el GPS, esto está muy oscuro y da un poco de mal rollo además tiene pinta de que va a hacer tormenta, tengo el teléfono de Nat y de los de la banda, vamos a estar solos, ¡Genial! Ahora voy a tener que soportarle aún más, llamo al timbre, menos mal que está vez no hace preguntas absurdas y abre directamente

—No deberías abrir la puerta así, podría ser un ladrón— cierro la puerta a mi espalda, él sonríe y niega divertido

—Te recuerdo que te veo por la cámara

El origen del brilloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora