Capítulo 39: La dominación de la Leona(+18) Parte 2

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Bajo el dosel frondoso del bosque del Trébol, los árboles altos y robustos se alzan como guardianes centenarios. Sus troncos, envueltos en enredaderas y musgo, cuentan historias silenciosas de innumerables estaciones. Las hojas, en una paleta diversa de verdes, bailan con la brisa matutina. Rayos de sol se filtran entre las ramas, creando un mosaico de luz y sombras en el suelo cubierto de hojas secas.

A lo largo de un camino serpenteante, arbustos de bayas silvestres ofrecen sus frutos coloridos, tentando a las aves y pequeños roedores que se aventuran en busca de un festín matutino.Los arroyos cristalinos serpentean entre las raíces de los árboles, ofreciendo un refugio húmedo para flores acuáticas y renacuajos que bailan en las aguas transparentes.

Mariposas revolotean entre flores silvestres, libando néctar y pintando el aire con colores efímeros. Abejas zumban con diligencia, contribuyendo al constante murmullo de la vida en el bosque.Un ciervo, majestuoso y sigiloso, avanza entre los árboles. Sus astas se elevan hacia el cielo, adornadas con ramas y hojas que se entrelazan con su pelaje.

Pasamos a una fabrica de carne abandonada, donde vemos dentro de ella en un cuarto oscuro iluminado en medio de él a Acier, Nebra, Asta y Mereoleona, quienes estos 3 primeros estaban teniendo relaciones sexuales, el cual fue interrumpido por Mereoleona quien habia despertado y estaba criticando la acción que pasaba.

Mereoleona: Maestra, por favor reaccione, ¿lo que esta haciendo es perverso? - [Preocupada]

Acier: Mereo, yo estoy mejor que nunca, tan solo mira lo feliz que estamos mi hija y yo. - [Sonriendo con emoción mientras tenia líquidos vaginales de Nebra en su rostro]

Mereoleona: Es imposible que usted sea feliz con esto, reaccione, vuelva a ser la misma de antes. - [Desesperada un poco]

Acier: Te refieres a que vuelva a ser infeliz, con una vida en la que todos se burlaban de mi y me consideraban ingenua. - [Seria]

El silencio retumbo a lo dicho por Mereoleona en la habitación por unos segundos, donde despues de eso Mereoleona dice lo siguiente.

Mereoleona: Usted no es ingenua, es lista, bella y fuerte. - [Seria]

Acier: ¿Y de algo me sirvió eso antes de desaparecer? - [Preguntándole con una cara seria]

Mereoleona: A mi si, gracias a eso pude seguir adelante. - [Un poco triste]

Acier: Pero no eres feliz, porque se que sigues sufriendo por lo de tu padre y de lo que te hizo Zack, eso no es felicidad. - [Seria]

Asta al estar cansado de escuchar lo que decían ambas, volvió a meter su polla dentro de Acier y pasa lo siguiente.

Acier: ¡Hickkkk......! - [Chillando con una cara perdida por la polla que le metió Asta] - *Otra vez me lo metió todo hasta topar mi útero.* - [Pensándolo internamente con una cara atontada]

Mereoleona: ¿Maestra? - [Incrédula por la forma en que vio que la clavaron]

Acier: Esto es felicidad, Mereo, créeme que me tarde un montón de tiempo en comprenderlo. - [Sonriendo con cara de tonta]

Mereoleona al no creer lo que veía, quiso safarze rápido del amarre de la silla, pero de repente Asta ve lo que queria hacer Mereoleona, por lo que le dice a Nebra lo siguiente.

Asta: Aun no te corres, ¿verdad, perrita? - [Preguntándole a Nebra con una sonrisa malévola]

Nebra: N-No, papi. - [Excitada con una cara nerviosa tocándose su coño]

Asta: *Quiero ver que rostro pondrá por lo que pasara.* - [Pensándolo internamente mientras embestía a Acier y la hacia gemir de placer] - Acier, ya oíste a tu hija, se una buena madre y ayúdala. - [Sonriendo]

Segunda OportunidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora