Violeta
Sonreí. Estaba bastante contenta y emocionada de que Nayara hubiese conseguido al que le gustaba, pero que fuera futbolista y trabajasen en el mismo sitio... Me daba muy mala espina.
Sin darme cuenta, me quedé mirando a la nada con mis pensamientos hasta que la voz de Nayara me despierta—Ey, ¿Estás bien?, te has quedado como empanada.
—Si, sí, supongo que será el cansancio, ¿no crees que es hora de irse ya? Hemos festejado suficiente por hoy.
—Tienes razón, pero antes tenemos que despedirnos de nuestros amigos—Me dice emocionada a lo cual yo ruedo los ojos al escuchar la palabra "amigos", sinceramente para mí no les consideraba ni siquiera ni simples conocidos.
—Nayara, ten cuidado. Sabes que teniendo el trabajo que tienes no debes irte mucho de la lengua con ellos—Automáticamente me río por la tontería que acababa de decir, "no debes irte mucho de la lengua con ellos" repetí mentalmente, ya que con uno en específico se había ido demasiado.
—Bueno, ya me entiendes...—Digo tratando de corregirme—Me refiero a que al menos lo evites, puedes perder el trabajo de tus sueños por un hombre.
Nayara suspira—Sí, lo sé Vivi, realmente ahora mismo las charlas que me quieras echar no van a servir de nada porque todavía sigo en la nube.
Ay, no había remedio con ella. Obviamente estaba feliz, Arda le gustaba, le puso el ojo y cayó, algo normal en Nayara, pero realmente le preocupaba la situación, tal vez simplemente estaba siendo demasiado paranoica, pero tenía muchos motivos para desconfiar en hombres.
—Bueno, vamos a despedirnos de ellos y para casa ¿Vale?—La sonrío y la paso mi brazo por la espalda acompañándola en el camino, además de estar en la nube como acababa de decir hace medio minuto, también estaba bastante afectada por el alcohol.
Dios. Mi mandíbula cayó al ver el panorama del reservado, Vini y Tchouameni con las mismas chicas de antes, pero Bellingham estaba con otra diferente, además de que literalmente las chicas hacían cola alrededor del reservado, no daba crédito a lo que veía.
—Eeh, ¿Hola?, perdón perdón, siento interrumpir pero era para deciros que nos íbamos ya, gracias por habernos dejado estar aquí—Lo de los futbolistas era un caso aparte sin sentido ni lógica, parecía que tenían pánico a las relaciones, demasiado mujeriegos.
En cambio Arda, estaba en el sofá apartado con el móvil, me daba muchísima ternura, sin duda Nayara tampoco tiene tan mal gusto.
Al escucharme hablar Arda levantó la vista del móvil y dirigió primero la mirada a Nayara, se levantó y bajó las escaleras que eran apenas imposibles de sobrepasar aunque fueran tan solo 4 ya que estaba lleno de mujeres.
—Te escribo por Instagram, aunque supongo que nos veremos mañana ¿No?—Dice Arda a Nayara.
—¿Cómo? Enserio trabajas los sábados Nay, eso se podría considerar explotación laboral—Río yo sola ante mi chiste ya que parece que Arda y Nay estaban muy ocupados dedicandose miraditas apesar de estar literalmente enfrente.
Pero de repente sin esperarmelo, noto una presencia detrás mía.
—Bueno explotación lo que es decir explotación... No lo consideraría, pagan demasiado bien supuestamente—Me giro lo más rápido que puedo al sentir como una voz conocida me susurró al oído.
—¡Jude joder! Casi me da un infarto—Me pongo la mano en el pecho cómicamente lo cual causa alguna risa en el moreno.
—Tampoco pensaba que era tan feo—Empieza a hacer caras raras y poses de modelo bromista consiguiendome sacar una sonrisa, lo cual no era fácil.
—¿No te cansas de tantas tías?, es decir mira a tu alrededor—Cuanto más miraba, más me agobiaba, odiaba las aglomeraciones.
Sonríe pícaro—¿Cansarme? ¿Yo? ¿De chicas? Ja, jamás.
—Cada día pierdo más la fe en los hombres—Digo a lo bajini.
—¿Qué has dicho?
—Nada nada, hablaba sola—Dije haciéndome la disimulada.
Jude entrecerró los ojos—Si hay una cosa que más odie en el mundo después de que me tomen por tonto es que me dejen con la intriga.
Levantó las manos y hago el gesto de cerrarme la boca con cremallera, de repente Nay interrumpe.
—No sé si interrumpo algo pero Vivi, tengo unas ganas de potar increíbles necesito que vayamos a casa ya, porfavor.
Realmente agradecí la intervención de Nay, estaba comenzando a palpar una tensión sexual un poco extraña para mí y quería huir como fuese.
Jude ríe descontroladamentr a lo cual le dedico una mala mirada—¿Que te pasa a ti ahora?
—¿Vivi?—ríe aún más.
—Es mi apodo, gilipollas—Me cruzo de brazos, sus constantes burlas a mí nombre empiezan a acabar con mi poca paciencia.
Nay se dedica a observar todo desde lejos mientras trata de aproximarse a la salida.
Sigue riéndose—No se que es peor, violeta o vivo. Definitivamente ni tus padres te quieren ni tus amigos tampoco—Dice bromista.
—Vete a la mierda—Le saco el dedo mientras alcanzo a Nay.
Llegamos al coche sin decir ni una palabra, cosa que me extrañaba. Arranco el coche y Nay se decide a hablar.
—Llámame loca pero... Jude y tú tenéis una chispa interesante.
—Nay—suspiro, ella era de las típicas que a la mínima interacción que yo tenía con algún hombre se emocionaba mucho creyendo ya que me iba a casar con él y toda la movida.
—Lo primero de todo es que literalmente nos acabamos de conocer, se ha liado con dos tías en mi cara y para colmo se ríe de mí nombre. La verdad a mí no me atrae nada—mentira, creo que es la mentira más grande que le he dicho nunca a mí mejor amiga. Bellingham me ponía como una moto, sacaba otro instinto de mí el cual yo creía enterrado.
—Ay violeta, siempre eras tan negativa, no cuesta nada soñar y hacerse películas bonitas en la cabeza.
—No Nay... Eso es lo peor, luego la ostia es más grande—Digo mientras me concentro para llegar a casa.
Holaaa perdón por tardar tanto, intentaré ser más activa y no tardar como hoy, os aviso que la historia va a tener desarrollo, no se van a casar y ser felices al capítulo 10 :), todo a su tiempo.
Espero que os esté gustando, os quieres y cuidaros mucho🩷
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Crossroads |Jude Bellingham| +18
FanfictionElla, estudiante de periodismo deportivo y fiel creyente que los futbolistas son una mierda Él, con miedo a abrirle las puertas al amor y algo mujeriego "Nayara, fisioterapeuta deportiva del Real Madrid, la mejor amiga de Violeta tiene la gran idea...