Amor imposible

5: La Cena.

CAPITULO 5

-Que les gustaría tomar señores

-Yo creo que uno de tus mejores vinos, Camila

Al tomar la orden la rubia mesera que responde al nombre de Camila me encuentro mirando la carta tratando de decir alguna opción, siento como mi teléfono me notifica con un mensaje

-Hola, dónde estás ya llegué al restaurante

Barrí el lugar con la mirada buscándola, a lo lejos logro ver a una chica hermosa con un vestido largo ajustado lo cual se llevó completamente mi atención, me percaté de quién era esa chica como no reconocería esos ojos verdes el mundo se congeló todos a mi alrededor desaparecieron, mi respiración se aceleró y las manos me empezaron a sudar frio

-Tierra llamando a zara -dijo mi hermana

-Discúlpame un momento -todos en la mesa incluyendo a la mesera sirviendo el vino a las copas se quedaron observando

-Saben que le pasó ahora

-Eso le paso

Aisha quien aún se encontraba en la recepción del restaurante con el fortachón de Adam al lado de ella, siguió buscándome hasta que por fin se percató que estaba enfrente de ella.

-Viene conmigo -le dije a la recepcionista que sólo se limitó a sentir sin decir ninguna palabra

-Hola, Wow, te ves hermosa te queda perfecto ese color resalta tus ojos

-Muchas gracias Zara no tienes por qué molestarte en comprarme un vestido te lo pagaré lo juro

-Oye tranquila yo te compré ningún vestido y si así lo fuera jamás te dejaría que me lo pagaras

-Si tú no lo compraste entonces quién fue

-Tal vez Adam con órdenes directas de mi hermana

-Agradezco todo lo que hacen por mí tú y tu familia me han ayudado demasiado incluyendo a mi padre

-Eso agradecerlo a mis padres yo ni siquiera soy parte de la compañía no tengo nada que ver con eso

-Por qué no eres parte de la compañía, si es que puedo preguntar, claro

-Hace unos pocos años me ofrecieron trabajar con ellos, pero me negué a formar parte quería saber lo que es ganarse la vida de verdad

Dejamos la conversación a medias caminando hacia la mesa recibiendo miradas de asombro y otras juzgándonos, algunas otras admirando a la bella mujer que me tomaba de la mano. Al llegar a la mesa Camila aún seguía sirviendo el vino.

-Aisha, cariño es un gusto volver a verte -Dijo mi madre levantándose de la mesa a lo que todos los presentes imitando su acción

-Hola Señora y señor Henderson, el gusto es todo mío

-Hola hermosa cómo has estado

-Hola Cristian, hola, Sam es un placer volver a verlos a todos, gracias por la invitación a esta linda cena

-Nos encanta que nos acompañes en este evento tan importante

A lo lejos escuchamos un carraspeo de garganta Camila aún de pie a un lado de la mesa nos hizo volver a prestarle atención

-Buenas noches, que te ofrezco -dijo Camila mirando a Aisha, pero esta vez muy diferente de la manera en la que me veía mí o a mi familia.

-Am yo creo que vino también por favor

sirvió el vino en la copa para después empezar a tomar nuestra orden -Están listos para degustar nuestros platillos deliciosos

-Para mi esposa y a para mí un filete término medio con vegetales por favor