Volver a nacer

Las antípodas ideológicas

Llueve, el sonido de las gotas rebotando sobre los cristales de la ventana ha conseguido que Patricia se quedase dormida sin darse apenas cuenta.

Llaman a la puerta.

BIEL
¿Se puede?

Patricia está recostada de espaldas, da un ligero sobresalto y se reincorpora.

BIEL
Lo siento... no sabía que dormías.

PATRICIA
No te preocupes, duermo por aburrimiento.

Observa que trae un informe.

PATRICIA
¿Me cantas el menú del día?
No me lo digas... sopa y pan con queso.

Dice con sonrisa pícara guiñándole un ojo, Biel le devuelve una tímida sonrisa.

BIEL
Si quieres te traigo un kebab, aquí al lado hay uno que está de la hostia.

PATRICIA
Buag... Biel.
¿Qué local es?
Por mandarles al inspector de sanidad.

Biel frunce el ceño, Patricia ríe.

PATRICIA
Es broma, bobo, no soy tan burra. Además, en mis políticas habrás visto que tengo manga ancha con la inmigración...

BIEL
Patricia, no tengo buenas noticias.

La corta, Patricia cambia el gesto.

PATRICIA
Ya lo sé...

Biel se extraña.

BIEL
¿Has hablado con la doctora?

PATRICIA
No, pero con esa cara de vinagre que traes, sabía que no venías a decirme nada bueno.

BIEL
Tenemos que empezar otro ciclo cuanto antes.

Patricia resopla y aprieta los labios con gesto triste. Biel se acerca, se sienta a su lado y le acaricia ambas manos.

PATRICIA
No puedo más...

BIEL
No podemos parar ahora.

PATRICIA
¿Qué dice Néstor?

BIEL
Sabes que no quiere opinar.

Patricia frunce el ceño.

PATRICIA
Ya me lo imaginaba.
¿Cuando empezamos?

BIEL
Te repetimos analíticas ya mismo y en cuanto estén los resultados, nos ponemos con ello.

Biel se levanta de la cama.

BIEL
Intenta descansar.

Patricia asiente, Biel se dispone a salir de la habitación.

PATRICIA
Biel...

BIEL
¿Si?

PATRICIA
Tráeme un kebab de esos, anda...

Biel sonríe, asiente y cierra la puerta. Patricia se acuesta nuevamente y observa los cristales, ahora empañados. Cierra los ojos...