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Los tres jóvenes caminaron en dirección a donde estaban reuniendo a todos los estudiantes de la academia y a los profesores. Todos, absolutamente todos debían estar allí. Así que al llegar al campo trasero de la academia se encontraron con que los guardias del palacio ya estaban reuniendo a los estudiantes por curso, así como a los profesores a un lado. Incluso el director de la academia no se había escapado.

-se movieron bastante rápido- murmuró Ashary con los ojos entrecerrados y fue entonces que se percató de un pequeño detalle.

Giró tan rápido su rostro en dirección a Lyon que los huesos crujieron.

-¿Qué?- Lyonhart alzó la ceja por la intensidad con la que lo estaba mirando.

Asha lo agarró del cuello de su camisa y lo atrajo hacia él para hablarle al oído, aunque estaban realmente cerca. Dado los recuerdos del príncipe quiso separarse por la impresión, pero el agarre de Asha era firme.

-Oye Asha ¿qué pretendes?

Para ese momento los labios de Ashary estaban muy cerca de su oído y el calor de su aliento rozó la oreja de este.

-Imbécil, tú ayer tomaste la droga- las palabras del rubio hicieron que Lyon cayera en cuenta y no luchara más ni tuviera otro tipo de pensamiento más lo que podía suceder.

Asha se alejó levemente, aunque aún se mantenían muy cerca. Habló tan bajo que ni Charles, cerca de ellos y que no se inmiscuía los pudo escuchar.

-Van a usar el método de la aguja para detectar a todos los que consumieron la droga-

Lyon podía sentir la respiración de Ashary contra su mejilla, así como los labios de él se movían ligeramente... y su mente amenazaba a ir a otro lado pues se veían ligeramente más rojo e hincado de lo normal y muy bien que sabía él la razón... y su sabor. Su ceño se frunció y casi se abofeteó mentalmente para ubicarse en el momento. No era tiempo de pensar en otras cosas ante el problema que tenían delante.

-Van a pinchar la mano de cada uno y dejar que caiga una gota de sangre en alcohol. Si esta se pone negra hay presencia del químico, te lo comenté antes. Y tú... lo tienes en el sistema. Oye, me estás escuchando.

Lyon agitó su cabeza como si tuviera que despertarse de un trance para hablar como si estuviese normal.

-Eso no debe dar problemas, soy el príncipe, puedo decir que me infiltré y- sus palabras fueron acalladas por la mano de Ashary sobre su boca.

-Estás loco, lo menos que puede pasar es eso. Tu reputación caerá en picada y serás tildado de drogadicto, así como de conspiración. Además de que no podemos exponernos a que sepan que fuimos nosotros los que los delatamos.

Lyon apretó los labios en una fina línea.

-¿y entonces que pretendes que hagamos? A todos nos van a hacer el examen.

Ashary se quedó pensativo unos segundos y cuando alzó la mirada frente a él su expresión era mortalmente seria.

-¿Confías en mí?- soltó esa pregunto que dejó sin aliento a Lyon.

Confiar.

Nunca se lo había planteado como tal, si lo hacía o no. Es que no se lo había preguntado. Ellos habían estado tanto tiempo juntos que era natural que uno siguiera al otro como había pasado en la noche anterior, y si era en temas políticos pues él nunca había negado alguna decisión de Asha.

Si a eso se le llamaba confianza pues sí, lo hacía. Asha era su rival, pero estaba ahí porque se había ganado el lugar y era tan orgulloso que nunca usaría trucos sucios para ganarlo. Y sobre todo, ni siquiera el rey cuidaba tanto de la reputación de la familia real como Ashary.

Así que simplemente asintió con la cabeza levemente y por un momento creyó que fue su imaginación, pero lo escuchó suspirar... ¿de alivio?

-Fórmate al lado mío. Solo un grupo selecto de personas saben que yo estoy aquí infiltrado así que no puedo garantizar que el guardia que nos examine me siga el juego- Ashary retrocedió un paso y giró su rostro hacia Charles- Sígueme el juego, después te explico con más detalle.

Charles, habituado a tener que adaptarse a las diversas situaciones solo asintió, sabiendo que en este tipo de cosas no había nadie más capaz que Ashary. Así ambos lo siguieron para formarse junto a su grupo. En medio de todos había tantos murmullos que no podía definirse que decían, pero se notaba la incomodidad y la duda de que estaba ocurriendo, sobre todo de ciertos alumnos.

Después de todo, a la academia militar no asistía el cuerpo de soldados del palacio.

***

La inspección comenzó primero por los profesores. Tres guardias estaban encargados de ello, mientras uno tenía en la mano una bandeja con varias agujas y varios cuencos diminutos de alcohol de cristal llenos de alcohol, el tercero tenía un tablón donde iba tachando a personas. Por cada persona le agarraba la mano, pinchaban su dedo y dejaban que una gota de sangre cayera sobre el líquido. Al ser tan pequeña la gota esta apenas era imperceptible, y cada cierta cantidad de personas era cambiado el cuenco. Hasta que uno de ellos la gota cambió a negro al momento que llegó al cuenco.

Asha sabía que significaba eso, estaba lo suficientemente cerca para poder verlo. Mas los guardias no hicieron ningún escándalo, simplemente anotaron algo en el tablón y siguieron de largo. Claro que no harían un escándalo y menos un espectáculo, que llamara la atención y creara pánico. Querían tratar ese asunto de la forma más discreta posible.

Tras terminar con todo el grupo de profesores y directivos de la academia les fue indicado que caminaran hacia una puerta que daba al otro patio. Y antes que la puerta se cerrara nuevamente Ashary pudo ver como tres guardias alejaban al profesor que había dado positivo. Así que ese era el promotor.

Ahora tocaba a los estudiantes. Debía pensar rápido en qué hacer para que Lyon no fuera descubierto. Incluso si era de forma discreta, la rapidez de los rumores en ese mundo era sobrenatural.

Mi odioso duque omega ( trilogía corta Palacio de Cristal I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora