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Los guardias se fueron desplazando entre los diversos grupos haciendo las pruebas de sangre. Pasó el primer grupo donde Asha pudo identificar por el cambio del color de la sangre al menos a dos estudiantes implicados. Después el segundo grupo, el tercero y ellos estaban en el cuarto.

Para cuando comenzó la inspección del grupo de ellos Ashary se tensó. Realmente había estado tan atento recordando los rostros de los alumnos para ubicarlos en las familias correspondientes que debían ser investigadas que se le había olvidado lo más importante.

Lyonhart.

Tenía que pensar en una forma para que pasara limpio la inspección. La excusa de que lo estaba ayudado no ayudaría a su reputación y rumores y perdería puntos de confianza.

Ashary... no podía permitir eso.

Y pensando los tres guardias se detuvieron delante de él.

-Su dedo por favor- uno de ellos le pidió y Ashary extendió su mano y su dedo fue pinchado. La sensación no fue nada agradable, aunque apenas fue mísero. Una gota de su sangre cayó sobre el alcohol y se desvaneció. Estaba limpio. Ahora... tocaba a Lyon. Tragó en seco. Su mente estaba en blanco.

-Su mano por favor- le dijo el guardia al príncipe ya delante de él.

Y Ashary solo le quedó hacer una cosa, porque pasara lo que pasara todo sería mejor que si descubrían que había estado drogado.

La mano que Lyonhart iba a levantar fue agarrada por Ashary con fuerza.

-No seas cobarde- le dijo en voz alta recibiendo la atención de varios alumnos- Vamos, pon tu dedo, acaso te da miedo un pinchazo.

Lyonhart sin comprender frunció el ceño ante la vergüenza que le estaba haciendo pasar cuando notó la mirada de Ashary, que a su vez entrelazaba sus dedos con los del príncipe.

-Pínchelo rápido- Asha estiró la mano de ambos donde solo un dedo sobresalía de entre todos los enganchados entre ellos. La aguja rápidamente lo pinchó y la gota fue vertida en el cuenco

...

Esta se desvaneció. También limpio.

Los guardias siguieron ahora con Charles y solo cuando se alejaron tres alumnos más Asha soltó la mano de Lyon quedando las dos a cada lado de ellos. Se le había ocurrido en último momento, pero había funcionado, entrelazar sus dedos con los de él para sacar su propio dedo aprovechando que se mezclaban. Una jugada arriesgada dado que la mano de Lyon era mucho más grande que la de él, al menos los guardias no se habían percatado.

Suspiró sintiendo la espalda empapada en sudor y la mirada de varios sobre él. Ah, otra vez rumores. Ya sabía que muchos habían notado la atención que Lyon le estaba prestando, y este era el príncipe después de todo. Llevarse con él podría dar buenos beneficios a futuro. No era su caso.

-Gracias- escuchó a Lyon agradecerle inclinándose un poco hacia él- ¿Te duele?

Le preguntó debido a que ahora las dos manos de Ashary habían sido pinchadas.

-No es nada del otro mundo. He pasado por dolores peores sin quejarme- respondió sin prestar mucha atención a las palabras hasta que se dio cuenta y giró su rostro hacia Lyon. La expresión sombría que mostró el príncipe hizo que su pecho se apretara- Yo, ya estoy bien. No pienses mucho en eso.

Desvió la mirada intentando obviar el asunto. Era un tema que entre los dos... estaba muy fresco a pesar del tiempo que había pasado. Y es que como tal no lo habían hablado en serio. Tras ser herido y después de despertar tras la visita de Lyon se había enterado que este se había ido a la academia.

Mi odioso duque omega ( trilogía corta Palacio de Cristal I)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora