Headcanons, Oneshots • BNHA x tú •

Midoriya Izuku. +18

~ Una fiebre ~

Las clases finalmente terminaron y es hora de ir a los dormitorios, deseaba tanto llegar y recostarme en mi cama, pero antes el profesor Aizawa me pidió que limpiará el salón de clases como castigo, ¿Por qué? Todo por culpa de Denki, quien me hizo reír a media clase con un pequeño dibujo que había hecho intentando recrear al profesor.

Y ahora estoy sola en el aula, barriendo en silencio mientras comenzaba a estornudar de vez en cuando debido al polvo que se levantaba al barrer.

- _______, ¿Terminaste? - escuché la voz de Deku detrás mío, al mirarlo le sonreí un poco para después soltar un estornudo. Izuku es ahora mi novio, después de que por accidente o por azares del destino terminaramos siendo novios, me había escuchado decirle a Mina que él me gustaba y no me percate de su presencia.

- ¡D-deku! Pensé que ya te habías ido. Y-ya casi termino. - volví a barrer mientras sentía su mirada sobre mi. - ¿P-por qué no te has ido?

- No quería que te quedarás sola. - Me regalo una cálida sonrisa, aquella que hacía que me derritiera por él.

- Solo dame un momento, Zuki. - El asintió con la cabeza y seguí con lo mío, no me tarde nada, acomode algunas cosas y finamente me acerque a él.

Tome mi mochila y tome su mano para que comenzaramos a caminar hacia la puerta, pero éste me detuvo y me tomo de las mejillas.

- ¿Por qué estás tan roja? - Me miró con preocupación a lo que yo solo me quedé confundida, mi cuerpo estaba cansado, me sentía muy fatigada por alguna razón.

- ¿L-lo estoy? - asintió con la cabeza mientras tocaba mi frente.

- ______, estás hirviendo.

- ¿Q-qué? - Toque mi frente corroborando aquello, efectivamente estaba con temperatura, no lo había notado. - eso explica por qué me siento muy cansada.

Solté una pequeña risita debido a la situación, pero por parte de Deku solo se notaba una mirada preocupada. De un movimiento me cargó en brazos y se colocó mi mochila en la espalda.

- ¿D-deku? ¿Q-qué haces? - me agarre de su cuello debido a que sentía que me tambaleaba.

- Dijiste que estabas cansada, y estás enferma, te llevaré no te preocupes. - Sentía mis mejillas calientes, está vez por la posición en la que estábamos.

Me sentía como aquellas princesas a las que su príncipe cargaba de una manera tan romántica y cursi, pero era lindo. Podía sentir su respiración cerca mío.

Me quedé en silencio apreciando sus facciones, tenía tan cerca su pecho, podía sentir sus pectorales, su cuerpo bien ejercitado era algo que me atraía de él, pero por otro lado jamás habíamos hablado de algo relacionado o hecho algo más allá de un beso.

Al llegar a los dormitorios saludé a los chicos moviendo la mano ya que Izuku solo me llevo directo a mi habitación.

- Llegamos. - Me dejó sobre mi cama a lo que yo me quedé observándolo de una forma curiosa y juguetona.

- Zuki... Eres lindo. - El peliverde de inmediato se sonrojo a lo que yo solté una pequeña risa. Lo tomé de la mano y lo acerque a mi haciendo que se sentará a un lado de mi.