Rai's POV
Era viernes de movie night, teníamos todo muy bien arreglado con el sillón reclinado hacia atrás. Ya llevábamos tiempo en directo cuando Alondra dijo que todas las mujeres pegaban sin importar con cual mujer estuvieran saliendo. Fue entonces cuando vimos un mensaje pineado por uno de nuestros mods, era Angie la misma Angie que por alguna razón ponía celosa a Alondra.
— Mira lo que dijo Angie "Rai tú y yo pegamos" — leí, en cuanto lo leí vi que la cara de Alondra cambió ligeramente lo suficiente para que lo pudiera notar pues la conozco mejor que nadie. Pero no estaba segura hasta escucharla hablar.
— ¡En nada! — lo que dijo y su expresión fueron los que dejaron al descubierto lo que sentía. Por alguna razón Angie tenía el don que nadie más tenía el cual era ponerla celosa.
— Esta celosa — susurre por el micrófono a nuestros expectores. Lo cual los hizo volverse locos. Iba a decir algo más cuando sentí como el micrófono fue arrebatado de mis manos.
— Desmiento mi teoría anterior, ¡no todas las mujeres pegan! — se puso a argumentar diciendo que una de esas era Angie y yo.
Nos quedamos hablando de eso un poco más hasta que Alondra cambió de tema. Se veía normal frente a las cámaras pero por sus movimientos y su forma de expresarse podía sentir que no era así. Ella continuó todo el stream de twitch y el de kick así. Nuestras nenas la pasaron increíble en el stream pues Alo tenía un talento en ocultar lo que sentía a los demás.
Pero eso no pasaba conmigo podía ver que seguía molesta. Pues se había ido a su escritorio y se había sentado en su silla, no se había movido de ahí en lo que llevábamos de haber apagado directo. Lo más raro es que no estaba haciendo nada en la computadora solo estaba ahí sentada con su celular. Decidí llamarla para poder hablar.
— Alo, que te pasa — no me respondió y me ignoró por lo cual volví a hablarle. — Alondra que te pasa — dije, la cabrona no se dignó ni a dirigirme la vista solo siguió en su celular.
Fue entonces que me decidí en ir hasta donde ella para hacer que me mirara. Cuando estuve a punto de agarrarla por el rostro se levantó y se fue al sillón. La seguí y de nuevo se iba a parar cuando la agarró del cuello para que se quedara sentada. Para evitar que se parara me senté en su regazo con una pierna a cada lado de su cadera.
Agarrándola por la mandíbula para que me mirara le dije — hablo en serio que te pasa y por qué me ignoras — solo me miro seria trato de levantarse y me dijo — ya Rai no me pasa nada ¿te puedes quitar? —no la deje moverse.
— Mira hija de puta no te vas de aquí hasta que hables y digas que te pasa — dije mirándola directa a los ojos desafiándola.
— ¿Quieres saber lo que me pasa? — dijo de repente tomándome por el cuello fuertemente. Alondra no era de agarrarme por el cuello era muy rara la vez que lo hacía. — lo que me pasa es que te la pasas diciendo que tú y Angie pegan, que tú y Angie esto, tú y Angie el otro. — dijo de forma brusca.
Mientras aún me tenía agarrada por el cuello agarró con su mano izquierda mi cintura — ¿y que pasa eso te pone celosa mami? — dije queriéndola provocar más. — no sabes lo mucho que eso me encela amor — me dijo al oído con una voz ronca que hizo que mi vagina se contrajera.
— Y eso por qué te encela tanto, si tú dices que nada te pone — le pregunté solo por el hecho de enojarla más, lo cual funciono completamente — por qué tú eres mía y no puedes estar haciendo eso princesa — dijo.
Mientras movía su mano izquierda de mi cintura a mi pecho izquierdo apretándolo y masajeándolo bruscamente. No pude evitar que mi cabeza se echara para atrás y que mi garganta soltara un gemido mientras sentía como apretaba con poco más su agarre en mi cuello.
Sus manos en mis tetas y en mi cuello hicieron que mi coño se mojara. Alondra pareció darse cuenta pues empezó a besar mi cuello pasando de este a mi clavícula y mi lóbulo, mientras seguía jugando con mis pechos.
Se acercó a mi boca y con una de sus manos me agarró de la mandíbula y me acercó a ella pegando sus labios con los míos en un intenso beso. Pasó su lengua por mi labio inferior pidiendo permiso para adentrar su lengua a mi boca.
Nuestras lenguas estaban en una lucha por cual dominaría a la otra. Cuando sentí su mano derecha hacer su camino hacia mi espalda baja muy cerca a mi trasero. Con su mano empezó a jugar con este mientras me seguía besando con demasiada intensidad.
Ya no aguantaba más sentí que si no hacía algo mi centro explotaría por la excitación. Fue entonces que se levantó conmigo aún encima de ella y me pegó a la pared más cercana. Me tenía presionada con su pelvis pegada a mi centro.
Pero no lo suficiente para ni ser capaz de mover mis caderas para disfrutar de la fricción que mi coño tanto necesitaba. — bájate amor — dijo Alondra de repente. Le hice caso y lo siguiente que sentí fue como me volteo haciéndome quedar de espaldas a ella contra la pared.
Pasó sus manos por todo mi cuerpo enfocándose en mis pechos tocándolos por debajo de mi ropa y jugando con mis pezones. Bajo más sus manos y desabrochó el botón de mi pantalón bajándolo hasta dejarlo en mis tobillos.
Empezó a acariciar con sus dedos mi mojado centro enfocándose en mi clitoris, frotándolo con la presión correcta que mi coño necesitaba. Y lo único en lo que podía concentrarme era en sus dedos en mi centro y la necesidad que sentía por que me quitara la única prenda que la separaba del lugar que más la necesitaba.
Alondra pareció leerme la mente, bajo mis bragas lo suficiente para dejar mi coño mojado a su disposición. Fue entonces que acarició mi clitoris con sus dedos y no pude evitar soltar un gemido. Lo siguiente que hizo me dejó pasmada. La hija de puta abofeteo mi coño, la sensación que dejó me encantó, un gemido agudo salió de mi garganta.
— Eso te encantó ¿verdad puta? — dijo mientras me agarraba por el pelo haciendo que mi cabeza se eche hacia atrás y mi boca se abra. Pasó sus dedos por todo mi coño enfocándose en mi entrada sin meter sus dedos.
Pasó un buen rato torturándome de la misma manera, cuando entró de golpe dos de sus dedos. Los mantuvo sin moverlos y con cuidado se acercó a mi oído y susurró.
— Muévete y úsalos como tú quieras princesa hazte venir — Alondra no me tuvo que repetir otra vez cuando empecé a mover mi cadera sobre sus dedos haciéndolos entrar y salir repetidamente. — A...Alo porfavor — trate de decir pero mis gemidos y la falta de aire no me permitieron.
Alondra logró entender el mensaje y los empezó a meter rápido y fuertemente, entrando tan profundo llegando a mi punto golpeándolo repetidamente haciéndome delirar. No dejaba de gemir y rogarle que me follara más rápido.
Baje mi mano a mi clitoris para llegar más rápido al orgasmo que tanto estaba deseando. Cuando estaba a punto de llegar Alondra se dio cuenta y golpeó mi mano. — ¡Michelle! — grité al sentir el golpe y como metió más duro sus dedos.
— Si te vas a venir va a ser gracias a mis dedos puta — la mezcla entre sus fuertes envestidas y el como me hablaba me hizo venir. Alondra continuó susurrando cosas a mi oído y metiendo cada vez más rápido y duro sus dedos que sentí salir de mi coño chorros, haciendo temblar mis piernas sin poder mantenerme de pie me caí de rodillas al suelo con lágrimas saliendo de mis ojos gracias al fuerte orgasmos.
Alondra me cargo y me llevo a la cama y con sumo cuidado me dejó acostada — perdón si fui muy brusca bebé — me dijo mientras me daba caricias por toda la espalda. Después de unos minutos de estar así ambas por culpa de cansancio nos quedamos dormidas.
Escribo esto porque Pamela me dejó con las ganas.
Att. TiTi
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Eros | Railo
Fanfiction»Serie one shots Railo, todo basado en la ficción nada de esto es real. »Pareja principal: Railo »Alondra top »Rainelis btm Originalmente mía. Si a alguna de las involucradas le incomoda y lo pide la historia será borrada inmediatamente.