Desde el momento en que Lee Luo se fijó en el alfa Choi San, su mente comenzó a trazar un futuro a su lado.
Sin embargo, casarse con él no será tan fácil como pensaba y para que todo salga como lo había planeado, primero tiene que hacer que Jung Woo...
Habían pasado varios días desde que Luo había ido a la empresa de los Choi y San ni siquiera se había molestado en llamarla para confirmar su prometida cita para cenar.
Además, no había podido sacar de su mente la broma que Wooyoung le había hecho, pero quería seguir aferrándose a que era solo eso, una broma de mal gusto para hacerla enojar, seguía negándose a aceptar que San pudiera tener algo más que una relación laboral con una persona como él.
Aunque ella tenía al alfa en una perspectiva diferente, al final de todo, él era un hombre, y por más que no quisiera compararlo con otros alfas, no podía negar el hecho de que las aventuras amorosas de los empresarios con alguien que trabajaba con ellos Era bastante común, y por lo que le habían dicho algunos amigos, era realmente divertido y excitante tener una relación prohibida.
Pero si ese era el caso, estaba bien que su futuro alfa buscara diversión, no era algo por lo que tendría que preocuparse en el futuro, ya que esas aventuras no pasaban más allá de eso, nadie tomaba en serio a los omegas fáciles después de obtener lo que querían, y Luo se aseguraría de tener satisfecho a San para que cuando se casara con ella no tuviera ojos para nadie más.
Y a pesar de haberlo visto solo en dos ocasiones, se notaba la clase de persona que era Wooyoung, un lindo y coqueto Omega desvergonzado, quien seguramente había utilizado sus seductores encantos para liberar los bajos instintos del alfa, y ahora, quería engatusarlo con un hijo, que dudaba mucho que fuera de él.
Consciente de esto, Luo decidió que no iba a dejar que ese secretario se saliera con la suya, no iba a perder esta batalla sin pelear, ella se aseguraría de recordarle a Wooyoung su lugar.
Así que después de reflexionar sobre todo esto, Luo tomó la decisión de ir a buscar a San de nuevo y, por supuesto, no saldría de la empresa sin una fecha acordada para cenar con él.
Esta vez, la omega se arregló más que la ocasión anterior, eligiendo un cheongsam de manga larga , color blanco con pequeñas flores rosas cuyo largo solo llegaba hasta sus rodillas, destacando ligeramente sus largas y bien cuidadas piernas, un modelo que la hacía lucir. atractiva y decente al mismo tiempo.
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Una hora más tarde, cuando Luo llegó a la planta 16 pensó que todo estaría a su favor ese día, ya que Wooyoung no se veía por ningún lado y en su escritorio había una dama mayor beta, quien inmediatamente le notificó al CEO que ella estaba ahí y la invitó a pasar a la oficina tan pronto como la llamada fue finalizada.
La omega le sonorizó a la beta ,decidiendo que persuadiría al Alfa para que ella se quedará de forma permanente como su secretaría y podría hacer que Wooyoung se fuera a otra área, utilizando el pretexto del nacimiento de su bebé a su propio beneficio.
Avanzó hacia la oficina del CEO, pero, para su desgracia, San no fue quien la recibió, lo hizo su hermano mayor, Choi Mingi, quien a juzgar por la carpeta amarilla que sostenía en su mano, había ido a recoger un documento importante.
