La vista que recibió a Wooyoung cuando entró en el lobby del hotel Woosan hizo que las comisuras de sus labios se levantaron más ampliamente.
San tenía a Soobin sobre sus hombros, su pequeño cachorro también sonreía emocionado mientras ambos terminaban de colocar la estrella en el árbol navideño.
—Vaya, vaya, mira quién nos honra con su presencia.
El omega se giró ante la voz sarcástica que venía detrás de él.
—Lo mismo digo —respondió Wooyoung, con el mismo tono de voz burlón — Hola Luo.
Luo dirigió su mirada hacia San, para después volver a centrarla en Wooyoung.
—¿Aún no se cansa de ti? —preguntó Luo.
Wooyoung negó con la cabeza mientras colocaba su mano sobre su abultado vientre.
—Creo que esto es suficiente prueba de que no lo ha hecho, ni lo hará, querida.
—Bueno —Luo sonrió estirando su mano para colocarla sobre el vientre de Wooyoung —Sabes, estuve pensando que debería ser madrina de este bebé, después de todo yo presencie su concepción.
Wooyoung no pudo reprimir la escandalosa risa que salió de su garganta al recordar esa travesura y asintió con la cabeza varias veces.
—Deberías serlo, Luo, siempre y cuando no intentes quitarme a su Padre de nuevo.
—No puedo prometer eso —respondió Luo sonriendo con inocencia fingida mientras el Omega entrecerraba sus ojos hacia ella.
—¿De qué hablan?
Llegó otra voz haciendo que Luo y Wooyoung dirigieran su mirada hacia el Alfa que venía entrando con infinidad de regalos entre sus brazos.
—¡Mingyu! —saludó Wooyoung —Luo me estaba diciendo...
—Que quiero ser la madrina de su nuevo cachorro —interrumpió Luo esperando a que el personal del hotel tomara los regalos que llevaba para después acercarse al Alfa y abrazarlo —¿Qué piensas, cariño?
Wooyoung resopló divertido ante la mirada traviesa de Luo y negó con la cabeza al ver a la pareja perderse en sus miradas.
Poco después de la inauguración del hotel, la Omega había solicitado reunirse con él para disculparse sinceramente por sus acciones anteriores, Wooyoung pudo darse cuenta de que Luo no mentía y que tampoco era una persona mala, simplemente había tenido el mundo a sus pies todo el tiempo lo que la hizo creer ciegamente que podía tener todo lo que quisiera, incluso a las personas, nunca había tenido una amistad sincera como la que ahora tenían.
Además, Wooyoung no podía culparla solamente a ella de todo lo sucedido, al final de cuentas sus celos se apoderaron de él y se burló bastante de Luo con ayuda de Seonghwa, así que aceptó sus disculpas y a su vez también se disculpo.
Y quién iba a decir que en una comida amistosa en el restaurante RoseannePark, Luo conocería a su destinado, quien resultó ser el mejor amigo de Wooyoung, el Alfa Mingyu, un excelente neurocirujano.
Su relación floreció más rápido de lo que Wooyoung imaginó, aunque Mingyu era un Alfa muy especial, tierno y caballeroso, así que el Omega no se sorprendió cuando unos meses después anunciaron su compromiso, incluso el Omega había bromeado con Luo sobre si además del compromiso anunciarían otra sorpresa a lo que la Omega respondió bromeando que no todas amarraban a su Alfa de esa manera, lo que hizo que Wooyoung le sacará la lengua para después reírse escandalosamente.
—Terminamos —dijo San colocando una mano alrededor de los hombros de Wooyoung haciéndolo salir de sus recuerdos.
Wooyoung soltó un suave ronroneó cuando el Alfa presionó un beso en su frente cuando se giró para acomodar la diadema de reno que estaba usando Soobin, para después darle un ligero golpe en su nariz haciéndolo reír.
—Las habitaciones también están listas para nuestros invitados, Sannie —afirmó Wooyoung sonriendo cuando el Alfa se inclinó para colocar un tierno beso en sus labios.
—Será mejor esperar en el salón —dijo Luo aclarándose la garganta mientras Mingyu tomaba al pequeño cachorro que le extendía sus manitas para que lo cargara.
Wooyoung se rió cuando vió a Luo y Mingyu irse apresuradamente con Soobin entre sus brazos antes de levantar sus manos y rodear el cuello del Alfa, quien a su vez envolvió su cintura con ambas manos y lo acercó más a su propio cuerpo, tanto como el abultado vientre de su Omega les permitió.
—Estoy un poco cansado —dijo Wooyoung haciendo un puchero —¿Mi Alfa podría darme un masaje especial antes de que lleguen más invitados?
—Pero eso podría dejarte más cansado —murmuró San mirando a Wooyoung con los ojos llenos de deseo oculto.
—Aiyo, ¿en qué tipo de masaje estás pensando, pervertido?
San no respondió, en su lugar levantó a Wooyoung entre sus brazos con facilidad practicada y se dirigió al ascensor lentamente, intentando no sucumbir ante las seductoras feromonas que su Omega liberaba descaradamente.
Soobin estaría bien cuidado por sus amigos, así que tendrían aproximadamente una hora antes de que los demás invitados a la cena navideña llegaran, un masaje especial mientras tomaban un baño de burbujas iba a ser perfecto para que el Omega se relajara.
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Él es Mi Alfa
RandomDesde el momento en que Lee Luo se fijó en el alfa Choi San, su mente comenzó a trazar un futuro a su lado. Sin embargo, casarse con él no será tan fácil como pensaba y para que todo salga como lo había planeado, primero tiene que hacer que Jung Woo...