𝓜𝓲 𝓶𝓮𝓭𝓪𝓵𝓵𝓪 𝓭𝓮 𝓸𝓻𝓸

cap XXV: otra vez Columbia

4 meses después

- mami, a ver como te lo explico- estaba bajando a la cocina para ir a desayunar y luego irme al instituto

- sorprendeme lulu- me respondía mi madre sin apartar la vista de su revista

- em... ¿puedo ir a ver a pau jugar este finde?- cerré los ojos por miedo a su respuesta

- pero, a ver, ¿el sabe que vas?- descruzo sus piernas y dejo la revista encima de la mesa

- sí, de hecho me ha invitado él, dice que sus padres me quieren conocer- todavía no eramos nada, si que ya sabía la gente que teníamos algo, pero la gente cercana a nosotros, no había nada público

- que voy a hacer contigo, ve si quieres, pero el domingo te quiero en casa antes de las 5 de la tarde, eh- y volvió a dejar de prestarme atención

Después de la muerte de mi padre, mi madre no había estado saliendo mucho de casa y a mi me gustaba hacerla compañía así que casi todos los findes avisaba a mis amigos para que vinieran a casa y estar con mi madre.

Termine de desayunar, cogí la bici que era la primera vez que la cogía desde la lesion y me fui dirección al instituto.

- luuciaa- ví como mi amiga jimena se acercaba a mi corriendo mientras yo dejaba la bici

- hola hola, ¿que tal con oliver?- ah, sí, jimena y oliver habían empezado a salir, no sé cómo pasó todo pero habían empezado a salir

- ay pues genial, por cierto, sabes que marta y las demás se han peleado, me entere ayer

- vaya, que pena- dije con ironía y nos empezamos a reír, desde que marta y ese grupito se entero que iba a las olimpiadas y más tarde se enteraron de que había ganado un oro no me dejaron en paz llevaban tres meses del curso dándome por saco.

Entramos a clase y vi a mi grupo de amigos

- oye, sabeis que el viernes me voy a Barcelona a ver el partido y a ver a pau obviamente

- anda, la que decía que no quería nada, tu situación me esta recordando a la canción de columbia la parte de "Se le escapó un "Te quiero"
A la que no quería nada
Hasta que me conoció"- al momento que me dijo eso tuve un dejavu que me llevó a unos de los primeros días que conocí a pau.

Estuvimos hablando hasta que llegó la profesora.

Por fin había acabado un día más de clases, de esta semana sólo me quedaba mañana.

[📞]

- pau pau pau-  le dije emocionada cuando me cogió el teléfono

- dime peque

- ¡sabes que si que me dejan ir a verte mañana!

- ¿¡sii?!

- ¡sí! Tengo unas ganas de verte, que la última vez que nos vimos fue cuando lo de mi padre- aún me dolía recordar a mi padre y me seguía sintiendo culpable por disfrutar de mi adolescencia, de mis 16, bueno casi me quedaba solo 1 semana para cumplirlos.

- pues entonces mañana, cuando estés llegando a Barcelona me dices y voy a por ti a la estación de tren, ¿te parece?

-claro que sí- estuvimos hablando un poco más hasta que llegó la hora de irme a entrenar.

Cogi mi bolsa de atletismo y me fui, decidí cambiarme en los vestuarios de las pistas.

Al llegar solo me encontré a una persona en el vestuario, a la persona que menos ganas tenía de ver ese dia, marta, sí, la misma que dijo que ella se esforzaba más y que no entendía porque me habían seleccionado a mi para las olimpiadas y no a ella.

Suspiré al verla.

- se dice hola al entrar, eh- me dijo en tono de superioridad

- ay pues hola marta que tal te va la vida te va bien pues me alegro- dije en tono irónico e intentando cambiarme lo mas rápido posible

Al acabar fui a salir del vestuario cuando su chirriante voz me paro.

- podrías al menos ser agradecida conmigo, que si no llega a ser por mi tu no habrías estado en los juegos olímpicos- su comentario me había hecho perder la paciencia, me gire y cuando fui a decirle un par de cosas una voz me interrumpio.

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Holaa, que tal estáis? Espero que genial, y también espero que os esté gustando cada capitulo de la historia.

Os pediría que si podéis echarle un vistazo a la nueva historia que tengo en el perfil 𝕰𝖋𝖎𝖒𝖊𝖗𝖔  siento que os va a gustar también mucho

Bueno corazones, nos vamos leyendo bessooooooos💞