Lágrimas de sangre

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¡Escucha mi grito silencioso!
¡Siente mi dolor profundo!
Mis lágrimas son gotas de sangre,
que caen sin cesar, sin consuelo.

Cada lágrima es un pedazo de mi alma,
que se desvanece en el aire,
un recuerdo de lo que perdí,
un lamento por lo que nunca tendré.

La sangre de mis lágrimas es roja,
como la pasión que una vez sentí,
pero ahora es solo un recuerdo,
de lo que se perdió, de lo que se fue.

¡No te quedes callado!
¡No te quedes indiferente!
Siente mi dolor, comprende mi sufrimiento,
y únete a mi grito silencioso.

No hay consuelo, no hay paz,
solo el dolor, solo la tristeza,
un ciclo sin fin de lágrimas y sangre,
un sufrimiento que no cesa.

Pero aún así, sigo adelante,
un paso a la vez, un día a la vez,
buscando un resquicio de luz,
un rayo de esperanza en la oscuridad.

Y en ese camino, encuentro fuerza,
en cada lágrima, en cada herida,
una historia de supervivencia,
un testimonio de mi resistencia.

Para los que buscan expresar la intensidad del sufrimiento y la búsqueda de esperanza en medio de la oscuridad.

Lenguaje de las cicatricesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora