Just Us (El Origen De Los Guardianes X Maleoc)

3. Hola, y adiós.

Invierno de 1890. Víspera de navidad.

Narra Matthew.

Bueno, la diversión se ha acabado. Después de unas relajantes vacaciones y de haber proporcionado uno de los mejores Halloween's de la época, tengo merecido un descanso. Otro largo año sin tener nada que hacer, más que asustar inocentemente a algún niño.

Como amo esta época del año. Ojalá decir lo mismo de la persona encargada de ella.

Como sea. Aleteo con más fuerza mis alas mientras disfruto de un tranquilo vuelo hacia ningún lugar en específico. Noto las luces de las ciudades por las que paso, las hermosas decoraciones de navidad se notan desde lo alto. Las melodiosas risas de los niños llega a mis oídos y no puedo evitar sonreír ante la calidez que se instala en mi pecho.

Justo cuando regreso mi vista al frente con el propósito de concentrarme en avanzar, solo siento el impacto del choque de otra persona y yo, y el sonido de ambos al caer en el patio de una casa.

"¿Por qué esto me trae recuerdos?¿Será que estoy destinado a chocar de manera imprevista cuando menos me lo espero?"

-Puta madre... -me quejo mientras siento que he caído sobre un montón de decoraciones.

-No puede ser...

"Esa voz"

Levanto mi mirada, curioso y medio emocionado por confirmar mi teoría. Y ahí está, la persona con la que menos me imaginé encontrarme en estos momentos.

-¿Jack Frost?

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-Tú y yo tenemos algo pendiente, señor fantasma -Jack se queja mientras cruza los brazos y voltea el rostro hacia otra dirección.

-Buenas noches para ti también.

Jack me mira de reojo y suelta una leve risa, lo que causa que yo también ría un poco.

-¿Cuánto ha pasado, 150 años? -pregunto con verdadera curiosidad mientras le sonrío amigable.

Él solo alzó los hombros mientras sonreía. Giré mi rostro hacia la ciudad, se veía realmente hermosa desde aquella colina.

-Creo que un poco más que eso -suelto una pequeña risa.

-Y qué has estado haciendo estos años? Nunca supe a que te dedicabas. -preguntó mientras me miraba.

Sentí una pizca de emoción nacer en mi con aquella pregunta. Solo pude sonreírle.

-¿Has escuchado hablar sobre Halloween? -mantuve mi mirada en aquella ciudad mientras conversábamos.

-Uy, si.

Fingió tener un escalofrío y puso una cara graciosa.

-La noche donde salen fantasmas y esas cosas. No hay algo más tenebroso. Hasta el día de hoy, no sé cómo los niños se divierten en esa época. -siguió mientras se abrazaba a sí mismo de manera dramática.

Solté una gran risa ante eso. Jack solo me miró extrañado mientras seguía lamentándose acerca de esa celebridad.

-No me voy a ofender porque mi festividad es grandiosa, solo que tú aun no sabes disfrutarla. -expresé con algo de egocentrismo mientras reía.

-¿Tú festividad? -preguntó extrañado.

-Asi es. Yo soy el espíritu de Halloween -le dije con una sonrisa.