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Una maldita cena social es lo que le esperaba en la casa del matrimonio Chaikong-Kawai.

Asa iba a estar ahí, ella misma le dijo a Pharita que se tranquilizara porque Ruka no haría nada contra ella.

-Esta noche tengo una sorpresa para ti- Habló su esposa divertida.

Pharita quería vomitar lo poco y nada que había comido. Lo único que le hacía sentir segura era el vestido que Asa le regaló. De color negro con bordados del mismo color.

-¿No vas a decir nada señorita "quiero el divorcio"?- La diversión notándose en su suave voz.

-No puedo creer que seas asi- Gruñó Pharita.

-Y to no puedo creer que seas tan facil. Pero descuida, tanto que me deseabas, tal vez me tengas esta noche- Y dicho esto, el carro se detuvo.

Pharita se bajo rápidamente y caminó hacia adentro, Ruka se unió a ella después.

Asa la estaba esperando con una copa más en su mano, Pharita se dirigió a ella. Soltandose rápidamente del agarre de Ruka. Sentándose al lado de Asa feliz.

-Asa- Sonrío Pharita, tomando la copa y mirándola a los ojos- Viniste...

-No voy a perderme una oportunidad para verte... Estas preciosa, amor- Susurró chocando sus copas, para que solo Pharita escuchara.

Ya se sentía en el cielo. Ignorando que era la primera vez que Ruka estaba observando su interracion.

¿Tan facil resulto ser Pharita para andar como perro detrás de una tipa qué solo le quito su virginidad? Oh pero si se trataba de fáciles ella era la mejor. Se ganaba la vida siéndolo.

Y haciendo memoria de las cosas ridículas de su vida, se encontró de que ese mismo día era su aniversario. Debía aprovechar ese momento.

Tomó una copa y la alzó.

-¡Disculpen!- Hablo atrayendo la mirada de todos, incluso de aquellas dos idiotas- Hoy es un día muy especial para mi. Hoy have algunos años decidí unir mi vida a la de mi amada esposa, Pharita, mi preciosa y fiel Pharita- La miró y sonrío.

Asa frunció el ceño y Pharita trago saliva nerviosamente. Ruka se acercó hasta ella y poso sus labios contra los suyos.

Pharita libero sus lagrimas.

-Te amo. Te amo tanto que daría lo que fuera por ti, lo daría todo- Hablo y la miró como si de verdad sintiera amor.

Pharita se levantó de la silla y salió corriendo.

-¡Mi amor!- Hablo Ruka- Rita, regresa.

-Basta Ruka. ¡Estoy cansada de ti!- Pharita giro y vio a las dos mujeres allí.

-¿Porqué mientes Rita?- Frunció el ceño, luciendo verdaderamente confundida.

-¿Pharita?¿Qué significa esto?

Pharita caminó hasta ella y la tomó de las mejillas.

-No es lo que crees, Asa. Ella no es haci, Ruka me odia, nosotras no nos amam...- Se vio interrumpida por la voz de Asa.

-Pharita.

-No lo digas Asa, no lo hagas- Rogó desvastada.

-Hazlo Asa, la cubierta de amantes ya la tengo ocupada. ¿Sabes cómo gime como loca cuando esta conmigo, su esposa, en la cama?

-Pharita...- Asa se escuchaba algo cansada, y no es para menos.

-Es mentira, nunca la ame. Te amo a ti- Pharita se tiró a sus brazos y chocó sus bocas.

Ruka se sintió molesta, celosa tal vez. Porque su cabeza le reclamaba qué debía recibir aquel beso y no a esa estúpida que estaba alentando a su esposa a ser libre... Libre lejos de ella.

-Porfavor no te vayas- Susurró Pharita con lagrimas corriendo por sus mejillas y la voz quebrada.

-Ayer me dijiste lo mismo- La voz de su supuesta esposa se escuchó tan herida que hasta ella se la creyó.

Asa gruñó y salió de allí, mientras que Pharita lloraba descontroladamente.



Matame Lento - RuphaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora