Luego de la muerte de su padre, Ainhoa se muda con el resto de su familia a Manchester. Sin esperar que aquel primer día de clases conocería a una Giovanna, una profesora que se propuso ayudarla con sus clases de música. Lo que ella no supo hasta ll...
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(Playlist-Algo más - La quinta estación)
-GIOVANNA!!! -
La comencé a buscar por todo el lugar y a gritar su nombre ya que en la oscuridad se me dificultaba un poco encontrarla.
Me va a odiar, y eso es lo que me duele, el saber que es una puta locura todo lo que está pasando, POR DIOS Giovanna es una mujer hecha y derecha y yo a penas una adolescente tonta que se obsesionó con ella.
Es una locura la idea de haber escrito mi amor a través de una carta, fue una estupidez haber mandado a Sarah a buscarla aquel día en la gaveta, y es una total cobardía que se esté enterando de esta manera.
El secreto que pensaba llevarme a la tumba ahora mismo está saliendo a la luz, y no se por qué estoy más asustada, si por todo lo que estoy pensando o por el hecho de acabar de verla a unos pocos metros de mí.
Me detuve en medio de la arena, toda despeinada por el aire y la carrera que había dado. Mi pecho subía y bajaba y mis labios estaba entreabiertos tratando de controlar mi respiración.
Ella se puso de pie al verme y me clavó la mirada, aquellos cristales azules brotaban alguna que otra lágrima.Llevaba la carta en la mano y su cara me decía que ya la había leído.
Me acerqué perdiendo un poco el sentido de la conciencia y con todo el cuerpo en temblores.
-Escucha Giovanna, esto no debería ir ahí, yo escribí una tarjeta de cumpleaños pero mi prima se equivocó al coger el sobre y ....
Ella me escuchaba atentamente mientras quitaba algunos cabellos de mis labios y aquello me ponía más nerviosa aún.
-Entonces ¿si esto no era para mí para quién era?- dijo frunciendo el ceño.
-emmm...escucha, yo yo- comencé a tartamudear.
-No hace falta que me mientas, ya la he leído -apretaba sus labios, un poco confundida -¿Noa por qué no me habías dicho esto antes?- cruzó sus brazos y miraba al mar.
No sé cómo... me llené de valor aunque eso me costó comenzar a llorar, pero le dije toda la verdad, me acerqué frente a frente.
-Dime Giovanna, dime cómo le dices a tu maestra de literatura que estás jodidamente enamorada de ella, DIME!!!, explícame cómo se supone que deba actuar, que deba llevar esto, porque yo no lo sé - ladeé la cabeza con esta última frase- Dime si acaso no es una locura todo esto que me está pasando, ¿sabes cuantas noches te has colado en mis pensamientos y no te he podido sacar? ¿Tienes idea de las veces que me culpaba por no poder mirarte con otros que no fuesen...
-Dilo- me miró profundamente- DILO JODER...
-Que no fuesen ojos de deseo, de amor, ¿tienes idea de eso?-
Suspiré pesadamente limpiando mis lágrimas y maldiciéndome en voz alta. -MIERDA- mi rabia contra mi persona era demasiado notable.
-Es que Noa todo esto está mal - dijo virándose de espaldas a mí.
