Capitulo 3: "Pelea turbulenta"

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Normal PoV

El peliazul casi por instinto se puso nervioso, no quería nadie más viera a su amigo triton. Tanto porque sabía que nadie lo entendería y que seguramente le harían daño, la gente todavía no entendería que era lo que pasaba entre ellos 2. Casi por instinto tomo la cabellera del pelinegro sumergiendolo de nuevo en el mar salado, Tom entendía que pasaba pero acato la acción que hizo el peliazul sumergiendose como el quería.

- Jake! Que sorpresa verte aqui, ¿que haces en la playa tan tarde? —una voz con acento de Texas ya se escuchaba al lado del peliazul, sacándolo de sus pensamientos.

- Ashley!? N-nada solo veía a ver a los peces ya sabes. . . Cosas mías. —muy nervioso por ser visto comenzó a jugar con sus manos a la vez que su tono se debilitaba. 

- Si clarooo. . . Y porque no tienes camisa?

- . . . Quería verlos más de cerca? E-es trabajo de campo! Por las cosas de la universidad y así. —trataba de aparentar estar confiado en lo que decía pero su tono lo delataba.

- Jaja bueno supongo que así será. . . Oye quieres que nos vayamos juntos? No creo que vayas a quedarte más tiempo aquí. ¿verdad? —sugirió su amiga que sin saber que hacía Jake ahí, y tal vez solo pasar el rato con su amigo que últimamente pasaba el tiempo muy aislado.

- Eh?. . . C-claro! Solo dejame recoger mis cosas y ya me nos podemos ir. —con prisa comenzó a recoger su libro de apuntes como la bolsa de papel que había dejado, despidiéndose triste del mar con la esperanza de que Tom lo viera.

Dicho y hecho el pelinegro lo veía aun sumergido, el no entendía que pasaba o porque su amigo se iba. . . ¿Acaso ya no lo quería? ¿Acaso sus amigos humanos eran más importantes? Triste veía como el humano saltaba de roca en roca hasta llegar de nuevo a la zona donde no había agua. . . Lugar donde el no podía estar.

Extrañamente la impotencia comenzó a llenarlo, se sentía inútil y débil no poder seguir al peliazul con él todos los días. . . Quería ser un humano como él, y tal vez sería más cercano a él y poder. . . Llegar a algo más.

Lastima que aquí no existen las brujas malvadas y con forma de pulpo a convertirte en humano a cambio de un trato sumamente injusto, que de seguro el triton cian aceptaria sin duda. No existía nadie. . . Nadie iguales a ellos.

De hecho hasta su misma especie desconocía su origen o como era que llegaron ahí, la mayoría solo despertaba y ya sabía nadar, solo había una persona que sabía algo medianamente de ellos mismo, el rey.

O bueno así se autodenominaba el mismo, usando hasta un accesorio en la cabeza con brillo resplandeciente, pero para Tom siempre lo veía como un viejo hacia muchas fiestas entre todos ellos nadie entendía que era lo que era una "fiesta" pero parecía divertido, solo eran ellos bailando y pasando el rato sin tener que cazar algo en las profundidades. . . Lo extraño era la mayoría de gente y sus risas contagiosas así como los peces globo qué extrañamente abundaban ahí.

Con algo de dudas decidió darle una oportunidad y comenzar a nadar contra corriente hasta una zona bastante desértica y casi sin luz, ese era su hogar de él y varios cientos de tritones y sirenas más pero se entiende. Tom era invitado aveces por similares a "pasar el rato" como el rey sugería pero el pelinegro siempre pasaba. . . No le agradaba tampoco mucho el estar con tanta gente.

Fue entonces que vio la susodicha cueva, o pasaje de esta. Llena de peces con un brillo muy ostentoso y moviéndose en un determinado patrón haciendo una especie de coreografía agradable, pero para el pelinegro era confusa y hasta irritante. . . Prefería los colores que había afuera o el color natural de la apuesta de sol, que era cuando tomaba sus tardes con el peliazul.

Amor En La Bahia (Tom x Jake) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora