Capítulo 8

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Desde que tiene memoria, siempre le gusto el aire fresco en la mañana.

Ya pasaron 3 meses desde su regreso y no se siente como en casa.

Aun así...

Kakashi debe admitir que aquella noche que pasó junto a su antiguo aquipo...

No fue tan aterradora...

El omega está fuera de la aldea, con su máscara abajo alrededor de su cuello. Esta suficientemente cerca para regresar rápidamente si lo necesitaban, pero lo suficientemente lejos para evitar las miradas...

Y a ellos...

No está 100 por ciento listo.

- sabía que te ocultabas de todos

Oye la voz tan conocida, mirando hacia abajo desde la altura de aquel árbol donde estaba.

- ¿pero también de mi?

Kakashi forma una ligera sonrisa divertida al ver el dramatismo del alfa recién llegado.

El alfa alzando una ceja, añadiendo un toque dramático a sus palabras, como si fuera una tragedia personal que Kakashi lo estuviera evitando.

El omega esbozó una ligera sonrisa divertida, casi imperceptible, mientras se recargaba más cómodamente contra el tronco del árbol.

- alguien tiene que quedarse en la sombra para que no se sienta tan sola - habla Kakashi, cruzando sus brazos.

- ¿La sombra te necesita más que yo? - pregunta mirando hacia arriba donde esta el menor.

Fingiendo indignación.

- Tu puedes manejarte solo, Yahiko - se encoge de hombros con una leve sonrisa - la sombra no

- me encanta que siempre te hagas el chistosito con migo - responde el alfa en tono de broma, también cruzando sus brazos - y siempre tan generoso... pero ¿como estas? ¿Estas bien?

Kakashi sabe...

Sabe a donde quiere llegar con esas preguntas y aun así, que el alfa sea quien las pregunte... no sé siente tan asfixiante a comparación de cuando alguien más las hace.

No siente la necesidad de huir...

- Respiro... - responde con un tin de sarcasmo en su voz - ¿te sirve?

Yahiko dejó escapar una risa suave, sacudiendo la cabeza.

- para ser tu, esa respuesta está llena de vida - bromea suavemente, tirando suavemente su cabeza hacia atrás recargandola en el tronco de aquel árbol.

El menor suspiró, no tanto por cansancio, sino porque sabía que aquel alfa no se iría hasta lograr que bajara de su refugio.

Estar con Yahiko todo se siente bien, tan puro, tan limpio, tan tranquilo y... único. El alfa lo conoce más allá detrás de esa máscara con la que lo conocío años atrás.

- ¿Qué haces aquí tan temprano? - preguntó el menor desviando su mirada hacia aquel rió, sin bajar todavía

- No podía dormir - respondió despreocupadamente - Así que pensé ¿quién sería tan masoquista de estar despierto a esta hora? Y, bueno, aquí estás

Desde su regreso, había pasado más noches en vela que descansando, atrapado en sus pensamientos, en sus recuerdos... en sus miedos.

- A veces, las aldeas puede sentirse más como una prisión que como un hogar - dijo el mayor con un tono más suave ahora, como si estuviera tocando un tema delicado - sobretodo con... los reglamentos tan exagerados y exigentes

Deja Que Tus Miedos Desaparezcan - Obikaka Donde viven las historias. Descúbrelo ahora