✦25: 𝐋𝐢𝐬𝐚𝐧𝐝𝐫𝐨 𝐌𝐚𝐫𝐭𝐢𝐧𝐞𝐳+18✦

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**Solo grita mi nombre**

La tarde estaba empezando a caer, los muchachos ya habían terminado su entrenamiento y ahora estaban disfrutando de unos buenos mates mientras charlaban y escuchaban música en el patio del predio.

Yo estaba tomando mate junto a Moli y Cuti ya que el Licha no sabíamos donde se metió, según dijo Molina, había venido la jermu, pero yo no la había visto entrar.

Los tres estábamos mirando el celular, Cuti estaba hablando con su señora, Nahuel andaba mirando boludeces en ig y yo estaba una serie en Netflix.

—Llego el más lindo— dijo el entrerriano una vez que se sentó, Cuti lo miró con el ceño fruncido.

—Donde mierda estabas— preguntó el cordobés mientras le devolvía el mate a Nahue.

—Durmiendo amigo donde va a estar, mirale la cara de recién me levanto que tiene— respondió Moli mientras se reía, Licha le pegó una patada y él se quejó.

—China me hace un mate— pidió Licha y yo asentí, le cebe un mate y segui en mi mundo mientras ellos hablaban y se reían, cuando se terminó el agua, les pregunté si querían más y me dijeron que no así que me fui a la cocina para cambiar la yerba y cargar el termo ya que yo sí quería seguir tomando mate.

Sentí que alguien me puso la mano en la cintura y yo me sobre salte.

—Eh tranquila reina— dijo Mati sonriendo, me quedé mirándolo embobada, no puede ser tan lindo este wacho, volví a girarme para cargar el termo, sentía un calor en mi cintura y me di cuenta que Matías no me había soltado.

—Mati— lo llamé y él me miró —Tengo que ir al patio, sacame la manito porfa— pedí sonriendo, él me hizo puchero y se acercó a mí.

—Quedate conmigo acá no seas mala— dijo mientras se acercaba a mi cuello donde dejó algunos besos húmedos, no pude evitar cerrar los ojos y sonreír al sentir los suaves labios de Matías.

—Mati...— jadee y él me dió un mini apretón en la costilla, al separase de mi cuello, me miró y dejó un tierno pico sobre mis labios para luego separarse y dejar que me vaya de nuevo al patio, hice todo lo posible para no estar nerviosa pero me era imposible, tanto mis piernas como mis manos temblaban por lo que había pasado recién.

Saqué mi celular del bolsillo y me quedé mirando un poco de ig para dejar de pensar en lo que pasó hace instantes, levanté mi vista ya que sentí que alguien me había golpeado la rodilla.

—En que andas— dice Licha mirándome de arria abajo, yo levanté una ceja y negué con la cabeza.

—En nada— dije sonriendo, él asintió y sacó su celular por lo que los dos nos quedamos mirando cada uno su pantalla, me sobre salté al sentir el calor de la mano de Licha sobre mi muslo, mire su mano y luego lo miré a él que sonrió de costado pero no sé si era porque yo lo miraba o porque vio algo en su celular.

Carraspee para luego hacerme el último mate ya que me había quedado sin agua, en eso veo como Licha se levanta y se va adentro por lo que yo decido hacer lo mismo, fui a la cocina donde dejé las cosas del mate y al darme vuelta me encontré con Licha.

—Que haces— dije pero él no respondió nada, en un abrir y cerrar de ojos los labios de Martínez estaban sobre los mios, al instante rodee su cuello con mis brazos y sentí sus grandes manos sobre mi culo el cuál apretó con brusquedad robándome un gemido en medio del beso.

Lisandro fue dejando besos por mi cuello mientras bajaba hasta quedar de cuclillas, él me miró sonriendo y desabrochó el short que traía puesto para dejar que caiga al suelo, hizo que ponga mi pierna sobre su hombro e hizo a un costado la parte de abajo de mi tanga.

Gemí cuando sentí la lengua de Martínez, él tenía su vista fija en mí mientras que yo hacía todo lo posible por no gemir, pero fue imposible cuando Licha metió sus dos dedos en mí y siguió chupando, rápidamente llevé mi mano a su cabeza para que siga con su trabajo hasta que terminé acabando en su boca.

—Tan rica y tan mía— dijo chupando sus dedos, yo sonreí y lo agarre de la nuca para comerle la boca mientras con mi mano bajaba su short, Licha sonrió de costado al darse cuenta de lo que quería así que no tardo en penetrarme.

Mordí su cuello para evitar gemir, Licha me bajó e hizo que me vuelta dejando que mis pechos queden sobre la isla que había en la cocina, gemí nuevamente al sentir como Martinez entraba en mí otra vez, pero los movimientos no eran para nada lentos, eran fuertes.

En la cocina solo se escuchaba nuestros gemidos y cuerpos chocando, aunque de vez en cuando Licha me pegaba alguna que otra nalgada.

Sentía que en cualquier momento me iba a venir, mi cuerpo vibraba levemente y eso Licha lo había notado.

Lisandro comenzó a cogerme fuerte y desenfrenado por lo que comencé a mover mis caderas escuchando los jadeos y algunas puteadas por parte de Licha, un par de embestidas fueron suficientes para que ambos acabemos al mismo tiempo.

Martínez al salir de mí, hizo que me de vuelta para comerme la boca con ganas, pero en medio del beso solté un gemido cuando sentí los dedos del entrerriano en mi interior, me estaba sobre estimulando, rasguñe sus brazos por el placer que estaba recibiendo.

Mi cuerpo volvió a temblar y yo tiré mi cabeza hacia atrás mientras gemia bajito, sentí como los labios de Licha estaban en mi cuello besando y dejando algunas marcas.

—Licha— gemí en su oído, él en respuesta, besó mí cuello y aumentó la velocidad de sus dedos hasta que no aguante más y termine acabando por tercera vez.

Lisandro sonrió victorioso y volvió a lamer sus dedos pero esta vez, también hizo que yo los lamiera.

—Mia y solo mía— dijo sobre mis labios, no entendía muy bien porque lo decía pero si Licha Martínez me dice que soy suya, quien soy yo para contradecirlo.

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Hay dios este carnicero me vuelve loca🤤😻

𝐎𝐧𝐞 𝐒𝐡𝐨𝐭 // Selección Argentina Donde viven las historias. Descúbrelo ahora