CAPITULO 20. FINAL DE LA HISTORIA

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- Mamá llegué!- gritó Tom entrando por la puerta de su casa.
- Cariño..no te esperaba!. - contestó Charlotte saliendo de la cocina sorprendida.
- Quise darte una sorpresa. Igualmente, no quiero que creas que vuelvo aquí para quedarme. Solo estoy de visita unos dias..volveré a Leipzig..
- Pero...que haras alla?..
- Estoy tranquilo mamá, solo eso.
- No será que tienes un noviecito desagradable en ese agujero de pueblo?- comentó Charlotte con asco.
- Veo que estar sola no te ayudó a mejorar.. creo que mi visita será mas corta de lo que creía. Dejaré mis cosas en mi cuarto- dijo Tom desepcionado por la actitud de su madre.
Llegó a su cuarto y se tiró de espaldas en su cama. El viaje en moto lo habia echo polvo y sentia palpitar la mano. Fue al baño a curarse y aprovechó para tomar un antibiótico y un calmante. Cambió sus vendas nuevamente y volvió a la cocina junto a su madre.

- Hijo, debo ir a trabajar hoy y me temo que no podré quedarme en casa.
- No te preocuoes mamá, aprovecho para descansar por el viaje.
- Esta bien cariño. Te veo en la noche- y con un beso en la frente se despidió de su hijo.
Esperó diez minutos antes de correr escaleras arriba. Entró al cuarto de su madre y revisó todos los cajones. En una de las mesitas de noche volvió a encontrar chequeras con pagos a nombre de Natalie. Separó algunas y le tomó fotos. El ultimo cheque habia sido firmado hacia un año, justamente el mismo tiempo que su madre habia comenzado a usar su teléfono para hacer movimientos de dinero.
Intentó ver si encontraba algo en la laptop de su madre, pero ni siquiera recordaba la contraseña. Necesitaba revisar su teléfono para tener mas seguridad de lo que pasaba..
Siguió revisando los cajones, y encontró unos exámenes de laboratorio. Los abrió preocupado,creyendo que su madre tenia una enfermedad, pero lo que descubrió, es que lo unico que tenia su madre era odio..un odio viceral a Bill.
Tenia entre sus manos, la verdadera prueba de embarazo de Natalie, y en el papel, decia que era negativa..no existia ningún bebé, estaba seguro y tenia las pruebas para demostrarlo. Pero ahora, restaba comprobar porque Charlotte le pagaba mensualmente a Natalie desde que tenia 12 años.

- un bebé?.. o sea que van a hacerme abuelo?- preguntó Jörg emocionado.
- Sii..- gritó Natalie mientras movia sus manos con alegria.
- Nunca pensé que podria tener nietos..que alegria tan grande- exclamaba el padre de Bill.
- Papá, Nat..voy a comprar algunas cosas al centro..necesito tomar aire. Quieren que les compre algo?- dijo Bill. Necesitaba salir de alli ahora que sentia que se ahogaba.
- Chocolates!- gritó la rubia..
- Gracias hijo. Ve tranquilo que yo me encargo de Natalie.
Bill apuró su paso, subió a su auto y manejó rumbo al centro. Primero compraria un celular nuevo y llamaria a Tom, y luego se desviaría un rato para visitar a Carl, el padre de Natalie.
No sabia en que condiciones lo iba a encontrar porque desde que su hija se habia mudado de ciudad, el se habia vuelto un alcohólico. Si le preguntaba por el dinero que Charlotte le pasaba todos los meses, quizas no le contestaria con la verdad, o simplemente no lo recordaría.

Con su nuevo celular en la mano, llamó a Tom mientras manejaba. Orilló su auto para charlar mas tranquilo y marcó su número.

- Bill?, por fin llamas!- exclamo Tom
- Recien puedo comprar el teléfono. Natalie no me soltaba para nada..- Comentó Bill bufando
- Encontre algunas cosas interesante en casa de mi madre. El examen de embarazo de Natalie, es falso Bill!
- Lo sabia!!...  sabia que me queria joder esta desgraciada!.. pero porqué tu madre tiene ese papel en su poder?..
- Estan complotadas Bill!.. esto viene desde hace años. Necesito sacarme algunas dudas pero estoy seguro que nos quieren ver separados.
- Estoy camino a la casa de Carl- dijo Bill-  voy a hablar con el para ver que me dice a cerca del dinero que tu madre le enviaba.

El barrio donde vivia Carl estaba bastante alejado de su casa. El paisaje era mas grotesco de lo que recordaba. La casa donde Natalie solia vivir de pequeña estaba casi al borde del abandono. La pintura quemada y resquebeajada. Ventanas rotas, cortinas echas jirones. Aun asi, Bill golpeó la puerta esperando que alguin saliera.
Escuchó unos pasos dentro de la casa y de pronto la puerta se abrió.
El estado de ebriedad del hombre era espantoso, pero aun así logro reconocer al pelinegro y sonrió al verlo despues de algunos años.
- Billy!.. que grande estas- dijo en ese típico tono en el que las personas pasadas de alcohol hablan.- Pasa..sientete como en tu casa.
- Carl, gracias. Puedo hacerle una pregunta? - se apuró Bill.
- Claro niño!.. dime
- Usted conoce a Charlotte Trumper?
- Charlotte..oh si!, si la conozco. Esa señora me ayudaba con dinero para comprar mi alcohol..ella hablaba mucho con Natalie..le daba consejos como si fuera su madre.. mi hija estaba enamorada de ti Billy!!.. cuando Nat se puso de novia contigo fue la niña mas feliz de la ciudad- recordaba Carl, y Bill comenzó a notar como la ebriedad dejaba paso a la razón...
- Pero que pasó luego Carl?
- Dejó de darme dinero a mi y se lo daba a mi hija. Ella me abandonó Bill..se fué de Leipzig y no se donde está..Charlotte me la quitó..
- Siento mucho enterarme de eso Carl. Solo queria saber como estaba..pase por aquí y quise saludarlo.. necesita que lo ayude en algo?..
- Si ves a mi hija, dile que venga a verme..la extraño sabes.. fué un gusto verte niño!..

Encadenado a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora