Recíproco - Pedri Gonzalez

Fin de año I

Estaba preparando mis cosas junto a Greta, ya que en unas horas salia el vuelo hacia Barcelona. Lupe aun no estaba de vacaciones asi que no pudo venir.

Ya habian pasado 5 meses desde que habia viajado para allá y de todo lo que habia pasado. Tenia muchas ganas de volver y visitar a Lamine y su familia, además de que ahora tenia nuevos amigos a los que visitar. Habia mantenido el contacto con Nico, Gavi y Ferran. Cada tanto me llamaban para preguntarme como estaba y contarme algun chisme. Asi que tambien tenía ganas de verlos a ellos.

—¿Nos falta algo?— pregunté intentando recordar todo lo que tenia que llevar. Mi amiga me ignoró. Estaba tecleando en su celular y no notó que le estaba hablando. —¿Con quién hablas? ¿Leclerc?— le quité el movil de las manos y recién ahi me prestó atención.

—Para! ya termino— intentó quitarmelo pero no pudo. Vi de reojo el chat pero en el movimiento no logré leer con quien hablaba. Se detuvo el juego de manos y me dijo. —Es Gavi, estamos arreglando para vernos en Barcelona— dijo y finalmente le di el celular.

—Pensé que sacabas turno para hablar con la corona española— dije irónica.

Sabia que ella y el sevillano habian estado hablando muy seguido este tiempo. Recuerdo que habian tenido relaciones en las vacaciones, pero no pensé que fueran a ir tan en serio. No paraban de hablar, ni por un segundo. Parecian dos enfermos.

—Envidia— soltó aun viendo su celular y sin parar de tipear en él.

—¿Envidia de qué? yo no quedé trastornada por un tipo que no veo hace 5 meses—

—¿Y cómo podrías? Si el tipo no te ha mandado ni un mensaje desde hace un siglo— se burló de mi.

Era verdad. Pedri no me habia mandado ni un mensaje desde Grecia. No le daba mucha importancia, pero Greta se burlaba por eso. No me molestaba ni me hacia falta, yo lo tenia claro. Habia sido un polvo y nada más. Pero para mi amiga, que habia quedado totalmente flechada por el español, era una razon de burla. Solo rodé los ojos sin darle mucha importancia y seguí con lo mio.

...

El avión llegó a suelo barcelones y enseguida nos fuimos a la casa de mi padre. Como era de costumbre él no estaba, pero si estaban Shei, Key y Lamine para recibirnos. Me dió ternura como habian decorado el living y la cantidad de comida que Shei habia cocinado. Los habia extrañado de una manera demencial.

Luego de la bienvenida llena de abrazos y risas, y gritos de Greta lidiando con el pesado de Lamine, subí al cuarto que me habían preparado, donde de nuevo, habia una camiseta con el número 19 en la cama. Sin entender qué significaba eso, me di vuelta y estaba Lami apoyado en la puerta.

—Para que uses mañana.— dijo sin mas. Lo miré raro sin entender. —Mañana es el último partido del año y vas a ir. No voy a entrar en discusión.— dijo con una sonrisa de costado. Me iba a negar pero se me acercó de repente y me dió un abrazo.

El era un caprichoso con todos y generalmente era dificil decirle que no. Yo tenia ese poder, yo podia negarle lo que pedia, pero esta vez me suavice por él. Hace mucho no lo veia y sabia que era importante para él ir a verlo. Asi que acepté la propuesta.

—Voy a ir, pero no voy a usar esa camiseta— sentencié.

—Pues si no la usas, no entras.—

—Sería genial no entrar.—

—Come pollas.—

...