BURDEL /sope

VI

Hoseok se dirigió a la salida del colegio, sintiendo una mezcla de emociones. Estaba feliz por su futuro con Yoongi, pero también estaba triste por dejar atrás a sus compañeros y la vida que conocía.

Al salir del colegio, vio a Yoongi esperándolo en el auto. Sonrió y se acercó a él.

—¿Cómo te fue? —preguntó Yoongi, besándolo en la mejilla.

Hoseok se encogió de hombros.

—Bien —dijo—. Me extrañarán, pero estoy listo para seguir adelante.

Yoongi sonrió y puso el auto en marcha.

—Estoy orgulloso de ti —dijo—. Sabes lo que quieres y no te dejas influir por los demás.

Hoseok sonrió y se acurrucó en el asiento.

—Gracias —dijo—. No podría hacer esto sin ti.

Yoongi tomó su mano y la besó.

—Siempre estaré aquí para ti —dijo—. Siempre te apoyaré.

Hoseok se sintió feliz y seguro, sabiendo que tenía a Yoongi a su lado. Juntos, podían enfrentar cualquier desafío que se les presentara.

Después de un rato, llegaron a la mansión de Yoongi. Hoseok se bajó del auto y miró a su alrededor, sintiendo que estaba empezando una nueva vida.

—¿Qué pasa ahora? —preguntó.

Yoongi sonrió.

—Ahora empezamos a planificar nuestra boda —dijo—. Y nuestra vida juntos.

Hoseok sonrió, emocionado por el futuro.

—Me encanta —dijo—. Me encanta la idea de pasar el resto de mi vida contigo.

Yoongi se rió y lo abrazó.

—Me encanta también —dijo—. Vamos a empezar a planificar todo. Quiero que nuestra boda sea perfecta.

Hoseok asintió, emocionado.

—Sí, sí, quiero que sea perfecta también —dijo.

Yoongi lo besó en la mejilla y lo llevó a la mansión.

—Vamos a empezar por la lista de invitados —dijo—. ¿A quién quieres invitar?

Hoseok pensó por un momento.

—A mis amigos del colegio, supongo —dijo—. Y a algunos de mis familiares.

Yoongi asintió.

—Bien, bien —dijo—. Y ¿qué tal si invitamos a algunos de mis amigos también? Quiero que conozcan a la persona que voy a pasar el resto de mi vida.

Hoseok sonrió.

—Me parece bien —dijo—. Quiero conocer a tus amigos también.

Yoongi se rió y lo abrazó de nuevo.

—Me alegra que estés emocionado —dijo—. Vamos a hacer que nuestra boda sea inolvidable.

Después de pasar horas planificando la boda, Yoongi y Hoseok se sentaron en el salón a descansar.

—Estoy tan feliz —dijo Hoseok, acurrucándose en el regazo de Yoongi.

Yoongi sonrió y lo abrazó.

—Yo también —dijo—. No puedo esperar para pasar el resto de mi vida contigo.

Hoseok se durmió en los brazos de Yoongi, sintiendo que había encontrado su hogar. Yoongi estaba seguro de que ese Hoseok era otro Hoseok. No era aquel Hope del burdel ni ese Hoseok del colegio. Era alguien de quien se enamoraba más.

Tal vez en el muy fondo, Hoseok solo necesitaba más atención de sus padres o tal vez un nuevo ambiente. Yoongi no lo sabía, pero lo haría feliz a pesar de todo.

Dos meses después

Solo faltaban un día para la boda, en los dos meses pasados, Hoseok se había encargado de que sus padres nunca lo olvidarán, Hoseok hacia lo posible para llegar a sus padres, mediante noticias, luego no los recibía. Hoseok a último momento los había invitado a la boda.

La boda de Yoongi y Hoseok se llevó a cabo en un hermoso jardín de rosas en la gran mansión, rodeado de amigos y familiares. El sol brillaba suavemente, y una brisa suave acariciaba los pétalos de las flores.

Los padres de Hoseok habían llegado, pero no se habían dirigió a él.

Hoseok lucía radiante en su traje blanco, con un ramo de rosas blancas en la mano. Yoongi vestía un traje negro elegante, con una corbata blanca que destacaba su sonrisa.

La ceremonia comenzó con la llegada de los padrinos, seguidos por el encargado que oficiaría la ceremonia. Luego, Hoseok caminó hacia Yoongi, acompañado por su padre, quien lo entregó a su futuro esposo.

Yoongi tomó la mano de Hoseok y comenzó a hablar:

—Hoseok, desde el momento en que te conocí, supe que eras alguien especial. Tu sonrisa iluminó mi vida, y tu amor me hizo sentir completo. Prometo amarte y respetarte cada día, por el resto de mi vida. Prometo ser tu refugio, tu apoyo y tu mejor amigo. Te amo por quién eres, y por quién eres cuando estás conmigo. Te amo por tu sonrisa, por tus lágrimas, por tus risas y por tus sueños. Te amo por todo. Soy tuyo y ru mío.—

Hoseok sonrió, con lágrimas en los ojos, y respondió

—Yoongi, eres mi todo. Eres mi sol, mi luna, mi estrella. Eres el que me hace sentir vivo, el que me hace sentir amado. Prometo amarte con todo mi corazón, con toda mi alma. Prometo ser tu compañero, tu amigo, tu confidente. Prometo apoyarte en tus sueños, en tus logros y en tus fracasos. Prometo amarte sin condiciones, sin reservas, sin límites. Te amo por quién eres, y por quién eres cuando estás conmigo. Te amo por siempre.—

Después de los votos, Yoongi y Hoseok intercambiaron anillos, sellando su amor y compromiso. El pastor los declaró marido y marido, y ellos se besaron apasionadamente mientras los invitados aplaudían y gritaban de alegría.

La recepción se llevó a cabo en un salón elegante, con una orquesta en vivo y una pista de baile. Los invitados bailaron y rieron, mientras Yoongi y Hoseok compartían su primer baile como marido y marido.

La noche terminó con un fuego artificial, que iluminó el cielo y simbolizó el amor eterno de Yoongi y Hoseok.