Curiosidad - König x Fem Reader

Capítulo 6

Andrew había llamado temprano para pedirte ir a un picnic con él en el parque que habían inaugurado en el centro de la ciudad, accediste a ir con el propósito de usar un atuendo que combine con el pañuelo que habías recuperado recién, buscabas entre tu ropa un vestido del mismo tono, encontrándolo casi de inmediato, tenías que aclarar dudas por tu cuenta aunque eso signifique una confrontación directa con el Coronel. Eran las tres de la tarde, la hora de irse estaba cerca.

Bajaste con tu vestido y el pañuelo en la cabeza, Kate te miraba orgullosa y feliz de verte tan hermosa con tu ropa y tu peinado muy bien elaborado, papá se levantó para presumir un poco de la belleza que "sacaste de tu padre"; ambos reían contigo.

König estaba sentado en uno de los sillones mientras leía un libro, pero su atención se esfumó cuando te vio parada frente a él con ese pañuelo que él había arrebatado antes, frunció el ceño y resopló, pero por dentro sus nervios estaban a flor de piel, quemando su tranquilidad de forma lenta y dolorosa.

— ¿Cómo me veo? – dijiste tocando tu cabello – ¿Te gusta mi pañuelo?

– Te ves como siempre, (TN) – respondió fingiendo que no causabas ninguna impresión en él – ese pañuelo se parece a uno que perdiste hace tiempo ¿cómo lo conseguiste?

– Es un secreto – respondiste en un susurro.

Kate miraba con atención la situación, deduciendo de inmediato que había algo que tu padre no se podía dar cuenta. La mujer se levantó y se acercó a ti – ven, quiero darte algo – dijo tomando a la muchacha de la mano y subiéndola a su habitación.

– Te gusta – dijo la rubia repentinamente – ¿Verdad?

– ¿Quién? – preguntaste tratando de desviar su atención. Era inútil querer que una mujer como ella se despiste ante tal situación, una mujer sabe diferenciar cuando alguien está enamorado y peor si es una agente especial.

– Quizás puedas engañar a tu padre, pero no me puedes engañar a mí – dijo mostrando su placa de la C.I.A – te gusta el amigo de tu papá, puede verse a kilómetros.

Tenía muchos sentimientos encontrados en ese momento, no podía dejar que ella se enterara de esto, no podía dejar que alguien de la C.I.A se enterara. Negué repetidas veces con la cabeza buscando una buena respuesta ante la insinuación de la rubia, podía mentir de cierta forma, pero debía primero convencerme de mi mentira antes de decir cualquier cosa – no me gusta, me llevo muy bien con él, es solo eso – traté de sonar lo más convincente posible. Kate me miró por un momento antes de fingir que mi respuesta había sido suficiente, se acercó a una de sus maletas y sacó un pequeño joyero en donde guardaba algunas pequeñas cosas.

– Quiero darte esto – dijo extendiéndome un par de aretes que venían en juego con una cadena – son de oro, quería entregártelos antes pero creo que esta ocasión es especial, vas a salir con tu novio ¿No? – decía mientras me ayudaba a colocar la cadena.

La cadena tenía un dije que tenía mi inicial, sonreí al ver lo bien que se veía con el vestido y lo mucho que resaltaban los aretes con el color de mi piel – es perfecto – dije con alegría. La emoción se apoderó de mí y las lágrimas fueron muestra de eso, cómo era posible que Kate pudiera darme un regalo como ese si recién nos conocemos, ella al ver mi rostro enrojecido me abrazó y me sostuvo un momento en esa posición.

El momento en que Andrew llegó se hizo ver cuando el timbre sonó, bajé rápidamente y me encontré con König recibiendo a mi invitado, quien ya tenía una cara de pánico bastante marcada. Mi padre por otro lado veía de lejos la escena, él de cierto modo dejaba que el trabajo rudo lo hiciera König, pues no quería hacerme creer que él era demasiado sobreprotector y, además, al coronel le quedaba mejor el papel de policía malo.