Esa noche, sin que él lo supiese, sería la primera de muchas en las que entraría a la taberna.
Ese primer momento, Gateguard de Aries lo usó para analizar a aquella mujer.
Comiendo sin prisas, cuando usualmente no hacía eso, él la siguió con la mirada.
Como otras de sus compañeras, ella se acercaba a todos los clientes sin excepción; algunos de ellos la sentaban sobre sus piernas o le hablaban cariñosamente para que la camarera les trajese más cerveza.
Nada que las otras mujeres no hiciesen.
Tan centrado estaba Gateguard de Aries en la mujer con sobrepeso, que ignoró todos los coqueteos que alguna que otra valiente jovencita le decía. Las chicas iban y venían, por fortuna, las que habían puesto su atención sobre él se desanimaron con facilidad y pasaron a otros clientes a los cuales apegarse.
Importándole muy poco no tener la atención del resto de las mujeres, con forme las horas pasaban, Gateguard de Aries notó bastante rápido que la camarera no tenía nada de tonta o poco intuitiva.
Ella... también volteaba hacia su dirección de vez en cuando, como si sintiese que él estaba observándola.
Siendo bastante más rápido que ella, Gateguard deslizaba sus ojos hacia la ventana, fingiendo que estaba mirando a través del cristal, el cual, también le ayudaba a mirarla por el reflejo.
Sólo eso había salvado a Gateguard, esa y otras noches en el futuro, de no ser descubierto por la camarera.
Su rutina, a partir de esa noche, y hasta algunos meses, sería esa.
Al terminar su cena, llegando a la conclusión de que el puré de patatas requería de más sal, Gateguard de Aries se levantó y luego de dejar el dinero completo por lo consumido. Se marchó sin hacer nada más.
Como se dijo que haría, no durmió. Se mantuvo en vela toda la noche, entrenando en el coliseo, hasta que el sol salió.
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Luna Roja | 🔞
Romance『Gateguard x Luciana』¿Cuál sería la razón por el cual el santo dorado, Gateguard de Aries, se obligó a sí mismo a pedirle a una mujer que no podría interesarle menos, de forma personal, que durmiese con él? Quizás, la razón iba más allá de su propio...