La Obsesión Del Rey★ [#1] [Terminada✓] [Editando©]

Capitulo 22

Cristal

Cada vez que pienso en el rey Félix la piel se me eriza y el miedo profundiza con tan solo pensar que mis sospechas sean ciertas.

Aun ni mi padre ni mi madre lo saben, el único que lo sabe es Busko y digamos que el está intentando confirmas mis sospechas.

Ya no he recibido más notas, pero eso no tranquiliza mis nervios. Trato de concentrar mi tiempo en otras cosas para ya no pensar en ello pero es totalmente imposible ya que tan solo recordar esos ojos grises me entran un nervio incontrolable.

Bajo al comedor a almorzar donde ya está el resto de mi familia en la mesa.

Tomo asiento mientras todos callan ante mi llegada haciéndome fruncir el ceño.

—¿Pasa algo? —cuestiono ante sus silencio.

Nadie me responde y empiezo a comer mi almuerzo a la espera de que sigan la grata conversación que llevaban antes de que entrara.

—¿Nadie va a seguir hablando? —cuestiono nuevamente.

Mi papá carraspea incómodo y no entiendo la razón.

—Como decía, eh.... Estoy viejo. —lo veo improvisar—. Y pronto moriré. —sigue.

Escucho a Busko reír y a mamá negar con la cabeza.

—¿De que hablaban?

—De esto hija, de que estoy viejo y pronto moriré. —explica papá aunque no le creo nada.

—¿Entonces porque se callaron cuando llegue? —pregunto entre cerrando los ojos buscando su mentira.

—Nos asustaste hermanita.

Pongo los ojos en blanco y sigo comiendo de mi almuerzo mientras los demás hacen lo mismo.

—Cambiando de tema así como los locos. —papá toma la palabra—. ¿Has tenido comunicación con Maximo? —me pregunta captando toda mi atención.

Yo que quiero dejar de pensar en ese rey soberbio y el me lo recuerda.

—Una vez creo. —respondo dudosa.

—¿Te ha amenazado con algo? —cuestiona atento a mi respuesta.

—No. —niego—. Lo único que ha echo es presumir lo bello he increíble que es. —hago mofa recordando su forma de ser.

—Ok.

—¿Porque la pregunta? —cuestiono yo ahora.

—Hay que descartar cualquier tipo de sospechas. —se encoge de hombros.

—¿Sospechas de que?

—¿No te han mandado más notas? —pregunta en su lugar.

—No.

—Bueno, sospechas sobre eso. —explica.

—¿Piensas que ese rey presumido, arrogante y soberbio es el causante? —me burlo—. El ni siquiera había notado mi presencia la primera vez que lo ví y se va a poner hacer estás cosas por Dios.

—¿Entonces quien más podría ser? —se mete a la conversación mamá.

Miro a Busko el cual me devuelve la mirada.

—Tal vez Liam. —bromeo.

—Si claro. —musita papá con cierto sarcasmo.

—¿Que? También puede ser el, así como lo ha dicho, no hay que descartar sospechas.