TBATE: Two lives after death

🔸Epheotus🔸

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"¿Dios? Nunca pensamos en eso realmente, pero ¿Qué tiene de importante eso?" Mi madre respondió con incertidumbre.

Solté un suspiro profundo, antes de acomodarme nuevamente en el sofá y comenzar a pensar sobre cómo contarle a mis padres la historia del mundo. "Bastante, pero antes, ¿Recuerdan el anuncio de los reyes el 10 de febrero?"

"¿En el que se anunció la existencia de otro continente? Según Vicent, es el mayor anuncio hecho desde la ascensión del Rey Glayder." Mi padre apoyó sus codos sobre sus rodillas antes de adelantarse.

Asentí calmadamente, y tomando aire solté las palabras que alterarían a cualquiera. "El nuevo continente es conocido como Alacrya, tal y como se anunció hace menos de un año, ellos llevan vigilando Dicathen hace años, quizá siglos o milenios."

Mi padre abrió los ojos con sorpresa mientras su cuerpo temblaba ligeramente, mi madre se tapó la boca con sus manos en shock.

"¿Qué estás diciendo, Arthur?" exclamó mi padre, su voz temblando ligeramente mientras intentaba procesar lo que acababa de escuchar. "¿Cómo es posible que hayan estado vigilándonos durante tanto tiempo sin que nadie se diera cuenta?"

Me mantuve impasible frente a ellos, manejando la situación con calma para evitar el descontrol. Windsom a mi lado se encontraba en silencio e inamovible, como si fuera una estatua. "Papá, no es solo que nos hayan estado observando. Tienen intenciones mucho más siniestras, dentro de poco, una guerra se desatará entre Alacrya y Dicathen."

Ellos se quedaron en silencio, repitiendo por lo bajo palabras como "Guerra" o "Alacrya", sus rostros palidecieron incluso más de lo que debería ser natural y por un instante creí que se desmayarían.

El rostro de mi madre era pálido, y su mirada se clavó en mí. "Arthur, ¿Cómo es que sabes eso? Tú maestro..."

Me mordí el labio inferior, antes de seguir. "Necesito que mantengan la calma, por favor."

Mi padre tomó la mano de mi madre, y con una mirada compartida soltaron un suspiro profundo. Sentí nerviosismo dentro de ellos, carcomiendo sus mentes con suposiciones y maquinando ideas que probablemente sean aterradoras. "¿Por qué nos cuentas esto? Arthur, tú... estás involucrado, ¿verdad?"

Entrelazando los dedos, Windsom estaba por responder pero lo detuve. En cambio me volví a acomodar en el sofá para poder seguir. "Dentro de poco tiempo, Alacrya comenzará una guerra contra Dicathen, probablemente la mayor guerra que ha tenido este mundo. Alacrya no es solo un continente lejano, ellos tienen tecnología más avanzada, también magos más poderosos, y ellos... Tienen a verdaderos dioses de su lado."

El silencio en la sala se volvió sofocante. Mis padres intercambiaron miradas de incredulidad y miedo, procesando mis palabras. "¿D-Dioses?"

Asentí sin miedo, y apunté al Asura a mi lado. "Windsom, él no es solo un mago, vieron la reacción de Rinia afuera... Windsom es un dios."

Sentí como el ambiente de la sala se volvía extraño, casi tangiblemente pesado. Mi madre bajó las manos de su boca, sus ojos clavados en Windsom, tratando de procesar lo que acababa de escuchar. Mi padre estaba rígido, apenas podía mover un músculo mientras su mirada oscilaba entre Windsom y yo.

Antes de que pudiera hablar, Windsom rompió el silencio. "Tal y como Arthur dijo, yo soy un dios. Soy de una raza superior, podrías titularme "Asura". Y Alacrya tiene a miles de Asuras de su lado" Dejando unos segundos en silencio, dejó que mis padres procesaran todo.