TRES

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—Bienvenidos al curso de biología humana jóvenes —habló la elegante profesora—

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—Bienvenidos al curso de biología humana jóvenes —habló la elegante profesora—. Es el último curso de biología en su estancia en la preparatoria...

Shoko recargo su cabeza en sus manos para admirar a la guapa mujer que tenía enfrente. Soltó un suspiro de enamorada, esa mujer reafirmaba su bisexualidad.

La mujer siguió hablando pero nada entraba por sus oídos, así que no se percató de las indicaciones que había dado la profesora hasta que vio a sus compañeros moverse.

Un dedo pico su hombro y la sacó de su trance.
Era el chico que había estado evitando todo su fin de semana.

—Otra vez seremos equipo —habló la profunda voz del varón.

—¿Ah? ¿Equipo? —alzó la ceja confundida.

Él también alzó su ceja confundido.

—¿Otra vez disociaste porque la "belleza" de la maestra te distrajo? —preguntó.

Sabía cómo era cuando una linda mujer se le ponía enfrente.

—Touche —guiñó un ojo y apunto al chico con sus dedos en forma de pistola.

—Ushijima-kun —una tercera voz se hizo presente—. ¿Te gustaría hacer equipo conmigo?

Kikuchi Mirko. A ojos de Shoko, era una de las chicas más lindas de la escuela y no era ningún secreto para ella que estaba detrás de su mejor amigo desde hacía tiempo. Sería la chica perfecta de no ser por su actitud tan pedante y soberbia. Sobre todo con ella.

—Lo siento, ya tengo equipo —contestó. Tomó a Shoko por los hombros y la puso frente a él—. Estaré con mi mejor amiga.

Shoko parpadeó un par de veces y después sonrió de forma incómoda hacia la chica. Sabía que no era del particular agrado de Mirko.

—Oh, de acuerdo. Es una lástima —miró de pies a cabeza a la castaña de forma despectiva y después se marchó.

—Vaya, tu ex-novia es un encanto —dijo con sarcasmo.

—No es mi ex-novia, mi madre me obligó a tener una cita con ella porque sus padres tienen dinero, pero es todo.

—Si claro, y no pudiste decirle que no a tu mamá —se burló.

—No en realidad —se encogió de hombros y después entrelazó su brazo con el de la chica para llevarla a la mesa de laboratorio del fondo—. Como sea, seremos equipo el resto del semestre.

—Solo me quieres de equipo porque soy una nerda —le acuso mientras achinaba sus ojos—. ¿Esto es cómo la típica película estadounidense donde el popular deportista usa a la nerd de la escuela para que haga las cosas por él?

—Si.

Ella abrió la boca con indignación. A veces era tan su primo.

—Pero también eres mi amiga, quiero hacer equipo contigo.

WILDEST DREAMS | USHIJIMA WAKATOSHI Donde viven las historias. Descúbrelo ahora