Capitulo 10

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Potter Manor estaba envuelta en una niebla ligera cuando Lord Fleamont Potter se preparaba para una reunión crucial en el salón privado de la mansión. A un lado de la chimenea encendida, aguardaban dos figuras imponentes: Lord Orion Black y Lord Abraxas Malfoy. Ambos habían sido convocados tras recibir noticias de la decisión de Harry, o Hadrian Prevell, como se le llamaba formalmente en ciertos círculos.

El fuego crepitaba suavemente, llenando la habitación con un cálido resplandor, mientras Fleamont entraba al salón con una calma que sólo los años de liderazgo y experiencia podían otorgar. Con un leve asentimiento, tomó asiento frente a ellos.

—Señores —dijo Fleamont con tono solemne, mirando a ambos en los ojos—. Estoy aquí para confirmarles que mi sobrino, Hadrian, ha tomado su decisión respecto a la propuesta que nos hicieron.

Los ojos de Abraxas Malfoy brillaron con un destello de satisfacción, mientras que Orion Black, siempre más reservado, mantuvo su expresión inalterable, aunque había una ligera tensión en su postura. Ambos hombres sabían que lo que estaba por decir Fleamont cambiaría el destino de sus familias.

Fleamont tomó una breve pausa antes de continuar. —Hadrian ha aceptado el contrato de matrimonio.

El aire en la habitación pareció detenerse por un instante. Orion inclinó la cabeza ligeramente, en un gesto de reconocimiento y aprobación.

—Es una decisión sabia —dijo Orion Black con su voz grave—. Sirius está preparado para asumir su lugar. Este matrimonio no solo fortalecerá nuestras familias, sino que forjará una nueva era para el mundo mágico.

Abraxas, con una leve sonrisa satisfecha en sus labios, añadió: —Lucius también está listo. Este es el futuro que tanto hemos planeado y esperado. El poder y la influencia de nuestras casas serán inquebrantables con esta alianza.

Fleamont los miró con una expresión estoica. —Sin embargo —agregó, su tono firme—, quiero dejar claro que Hadrian no toma esta decisión por obligación ni por simple política. Ha elegido darles una oportunidad a sus futuros esposos porque cree que hay algo más profundo en juego. Pero no duden que seguirá siendo libre, y nada en este contrato cambiará eso.

Orion asintió con respeto. —Entendemos eso, Lord Potter. Y pueden estar seguros de que Hadrian será tratado con el honor y el respeto que merece como el segundo heredero de la casa Potter y slythrin  y lord Prevell.

Abraxas, siempre astuto, mantuvo su sonrisa controlada. —Por supuesto. Lo que está en juego es mucho más que una simple alianza. Nos aseguraremos de que esta unión sea tanto para su beneficio como para el nuestro.

Fleamont se levantó lentamente, extendiendo una mano como señal de que la reunión había concluido. —Entonces, todo está dispuesto. Los preparativos comenzarán pronto. Que esta unión traiga la paz y la estabilidad que todos buscamos.

Ambos señores se levantaron y, tras un breve intercambio de cortesías, abandonaron Potter Manor por la chimenea. Mientras el fuego verde de la Red Flu desaparecía, Fleamont permaneció un momento en el salón, reflexionando.

Había comenzado una nueva etapa en la vida de su sobrino, y él solo podía esperar que, a pesar de las viejas rivalidades y los intereses políticos, Hadrian encontrara algo más en este inusual destino.

Una oportunidad para redimirse y quizás, finalmente, encontrar la felicidad.

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