El fuerte siempre domina al más débil, ese es la ley, pues la naturaleza animal así lo dicta, y eso aplica también a los países, pues un mundo que es muy diferente a la tierra en mucho sentido, sige conservado algo que lo hace igual a ella, las naci...
Imperio alemán / Palacio Real en Berlín / septiembre 31 del año 1945.
Narra Roderick.
No podía creer que ahora soy el gobernante de Alemania, solo llevo unas horas aqui, estoy en lo que seria mi oficina.
— Que suerte que se el idioma aleman, pero siento que lo hablo con mas fluidez — este mira su mano derecha, para con su mano libre se toca su ante brazo — ya no siento el dolor punzante.
No entiendo como termine en este cuerpo, pero esto solo significa una cosa, ya no tengo esa condicion neurológica, es un daño en la parte derecha de mi cerebro que no manda bien la señales a mis brazo y pierna derecho, haciendo que mi cuerpo no reacciones bien, y terminado dañado esa parte, y mucha bese debido a que no hacia el tratamiento completo, debido a no terne el dinero suficiente, terminaba teniendo unos dolores repentino en mi mano derecha y mi cabeza, muy fuerte, que a bese llevo a la idea de quitarme la vida.
— Tengo que comprobarlo — el se levanta para ir abri la puerta, una ves hay este la abre, y mira a dos guardias — disculpe podria llamar al oficial a cargo de mi protección.
— ¡Si kaiser! — el guardia ve inmediatamente hacer lo que se le ordeno.
Narrador
Tiempo mas tarde, se podia ver a unos guardia trotado, en la plaza que daba serca de el palacio, pero entre los guardias resalta uno que porta un uniforme muy diferente al de ellos, un uniforme de oficial, pero que destaca que es de un color gris claro. Todo los guardias que estaba en la macha estaba un poco sorprendido de que el Kaiser este en dicha marcha.
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— ¡Vamos señoritas, demuestres de lo que son capaces! — grita el sargento mayor Rochus Misch que esta a cargo de la guardia personal de el Kaiser.
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El estaba un poco asustado debido que el kaiser repentinamente queria participar en las practica, este pensaba que queria inspeccionar como entrena la guardia.
Narra Roderick.
Estaba muy sorprendido, mi cuerpo no estaba nada cansado, si estuviera en mi antiguo cuerpo, ya estuviera en el piso tirado con un dolor en el pecho, y sudando a mares, pero con este cuerpo no me e cansado. Pero ya pasaron 10 minutos excediendo el limite de mi resistencia de mi antiguo cuerpo, que solo era de 2 a 3 minutos.
