Leonid, ¿te encuentras bien? –preguntó Dmitry con un tono de preocupación.
("¿Cómo voy a estar bien, si cada vez que me muevo puedo sentir a tu amiguito?") –pensó el de ojos azules.
–Sí, estoy bien... solo un poco cansado. Déjame que me quede aquí por un momento.
Dmitry lo miró con confusión.
–Está bien, pero no te apoyes en mi herida –dijo Dmitry, soltando un suspiro y llevándose una mano a la frente.
Al cabo de 5 minutos, Leonid sintió algo en sus pantalones. Rápidamente colocó el vendaje, se bajó de Dmitry sin decir nada y se dirigió al baño de manera rápida.
Una vez dentro, Leonid, respirando con dificultad, no pudo evitar notar la presión creciente en su entrepierna. El roce con Dmitry había desencadenado una erección que se hacía cada vez más difícil de ignorar. Se bajó los pantalones y se liberó, sintiendo una mezcla de alivio y vergüenza.
"Maldita sea", murmuró para sí mismo, con la voz tensa."Esto es ridículo", se dijo en voz baja mientras comenzaba a tocar su miembro. Sus movimientos eran rápidos, de arriba para abajo, cargados de la excitación que había acumulado.
"Esto no debería estar pasando ahora"
Su respiración se volvió más agitada, y los gemidos escapaban involuntariamente de sus labios, inundando la habitación.
"Dmitry... maldición", susurró, su voz mezclada con frustración y deseo. Cada toque parecía intensificar la sensación, y la necesidad de alivio era casi insoportable.Finalmente, Leonid alcanzó el clímax con un gemido profundo, sintiendo una liberación momentánea. Se limpió rápidamente, se lavó las manos y la cara con agua fría, intentando despejar su mente. "Tengo que regresar... no puedo seguir así", dijo en voz baja, sabiendo que la situación con Dmitry no había hecho más que complicarse.
Se miró en el espejo, con la respiración todavía acelerada y la mente nublada por el deseo. "Esto no puede volver a pasar", pensó, mientras se preparaba para volver a la habitación.
Leonid regresó a la habitación y encontró a Dmitry dormido, finalmente vencido por el cansancio. La expresión del pelinegro era tranquila, muy diferente a la tensión que había mostrado antes. Con cuidado, tomó una manta y la colocó sobre el más alto. Mientras lo hacía, notó un mechón de cabello que sobresalía. Sin pensarlo, lo acomodó detrás de la oreja del pelinegro.
Se quedó ahí, observándolo. Dmitry, con los ojos cerrados y su semblante relajado, le parecía más apuesto. Había algo en su tranquilidad que lo hacía parecer casi irreal.
Dmitry se despertó sintiendo una pesadez en su cuerpo. Miró a su alrededor, desorientado. El reloj en la pared marcaba las 5:45 PM. Al sentarse, notó que estaba cubierto con mantas. Giró la cabeza y vio a Leonid sentado cerca, observándolo.
–¿Qué hora es? –preguntó Dmitry, su voz ronca.
Leonid esbozó una sonrisa.
–Casi las seis... de la tarde.
Dmitry frunció el ceño.
–¿Cuánto tiempo he dormido?
–Dos días –respondió Leonid, con calma–. Estaba agotado, necesitabas recuperarte.
Dmitry parpadeó, sorprendido.
–¿Dos días?
Leonid asintió.
Dmitry se quedó en silencio por un momento, procesando. Luego, miró a Leonid con una mezcla de gratitud y curiosidad.
–Gracias por.....mmm..por cuidar de mí –añadió un poco avergonzado; el moreno era muy orgulloso para agradecer a alguien.
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♡🌹ROSAS Y ARMAS🔫 ◇
FantascienzaSus personalidades eran distintas pero sus vidas eran iguales ...... solitarias. Acaso nuestros protagonistas hallarán el amor , tendrán un final feliz o uno cubierto de sangre y muerte por la Mafia . Los personajes no son míos, créditos a sus res...