Después de conquistar su primer combate en la segunda ronda del torneo, el héroe de lo oscuro se sintió lleno de energía, pero también se dio cuenta del agotamiento que empezaba a pesar en su cuerpo. Con el corazón rebosante de emoción, sabía que tenía que ir al hospital para ver a su madre y contarle sobre su victoria. Cada combate era un paso más cerca de su objetivo, y quería que ella supiera cuánto luchaba por ella.
**La Llegada al Hospital:**
Al llegar al hospital, Kaito sintió cómo la ansiedad se apoderaba de él. Corrió hacia la recepción, preguntando ansiosamente por su madre. La enfermera le indicó que la habían tratado, y lo condujo a la sala donde estaba.
Cuando Kaito entró, vio a su madre reposando en la cama, preocupaciones visibles surgiendo en su rostro. Sin embargo, en ella había algo de paz. “Hola, mamá,” dijo Kaito con una sonrisa forzada, incapaz de ocultar la emoción.
“Hola, querido. ¿Cómo te fue en el torneo?” preguntó su madre, su voz aún llena de cariño y aliento.
“¡Gané! El héroe de lo oscuro ha ganado su primer combate,” exclamó Kaito, sintiendo que la emoción chorreaba sobre él.
**La Noticia Abrumadora:**
Pero justo cuando estaba a punto de abordar la siguiente conversación, entró un médico, con una expresión seria en su rostro. “Lamento interrumpir, pero necesito hablar con usted, Kaito,” dijo, llevándolo a un rincón más apartado de la habitación.
El médico, con el ceño fruncido, le habló. “Su madre ha sufrido un choque. Hemos podido estabilizarla, pero su condición es crítica. Debe entender que no tiene mucho tiempo.”
Kaito sintió que el mundo se venía abajo. “¿Qué… qué quieres decir con que no tiene mucho tiempo?” preguntó, su voz quebrándose.
“Estamos haciendo todo lo posible, pero la gravedad de su enfermedad es alta. Necesitamos que esté preparado para lo que pueda suceder,” dijo el médico, manteniendo un tono profesional pero compasivo.
**El Dolor de la Realidad:**
Kaito volvió a la habitación, sintiendo que el miedo y la impotencia se apoderaban de él. Pasó junto a su madre, que lo miraba con esa mezcla de amor y preocupación. “¿Qué pasó, cariño?” preguntó, notando su cambio de expresión.
“Mamá…” comenzó, pero las palabras se atascaban en su garganta. “He conseguido ganar mi combate. Pero el médico me dijo... me dijo que...”
“Que no tengo mucho tiempo, ¿verdad?” completó su madre, su voz suave y serenamente resignada.
“¡No! No puedo permitir que esto pase. ¡Haré lo que sea necesario!” se apresuró a decir Kaito, sintiendo que la experiencia de ser un héroe y luchar en el torneo era insignificante ante la amenaza de perder a su madre.
“Escúchame, Kaito,” dijo su madre, tocando su mano delicadamente. “Has luchado tan duro por mí. No quiero que te preocupes por mí. Tu fortaleza es lo que más necesito ahora. Sigue luchando, y recuerda siempre que tienes el poder dentro de ti.”
**Un Nuevo Propósito:**
Mientras sus palabras resonaban en su mente, Kaito sintió una renovada determinación. “No te voy a perder, mamá. No mientras todavía haya algo que pueda hacer,” prometió, con lágrimas brillando en sus ojos.
Con su corazón quebrado pero decidido, Kaito supo que ahora su propósito era más fuerte que nunca. Continuaría con el torneo, pero también buscaría la manera de ayudar a su madre en su lucha por la vida.
Las sombras de la angustia lo envolvían, pero dentro de él, una chispa de esperanza seguía brillando. Encontraría la forma de salvarla y, tal vez, se convertiría en el héroe de verdad, no solo en el torneo, sino en su vida.
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The Hero of the Dark
RandomEn la ciudad de Lumenia, donde la mafia acecha y la esperanza se desvanecía, un joven llamado Kaito descubre un poder latente que cambiará su vida para siempre. Con la salud de su madre en juego, se convierte en el *Héroe de lo Oscuro*, un luchador...