Ecos del oeste

Capítulo IV: La prueba

Era medianoche, Evelyn fue lo más rápido posible para ir al centro del pueblo para proteger a los ciudadanos, pero era tarde, al menos para que ella lo hiciera, este Beckett ya lo había hecho, le había ganado está ronda pero era la última que le dejaría ganar, ella supervisaba como todos los policías recogían los cadáveres, ahí llegó el alcalde, parte de la prensa y el propio Beckett junto a Clay.

—Estos sujetos son de la banda de Booker—Decia Jack, mientras veía con asco la escena.

—No, el idiota ese es demasiado cauteloso como para un ataque así de directo—Se agachó Evelyn mientras hurgaba en el cuerpo de uno de ellos.

—Si, siempre se toma su tiempo como en Alabama.(Ella sabe de él, eso significa que debe tener algún tipo de conexión con Booker)—Este Beckett solamente caminaba de un lado a otro mirando fijamente a Evelyn.

—(Espero que no sospeche de mi, si lo hace podría poner a Eleanor en peligro)—Seguía hurgando en el cadáver del criminal, ahí había ciertas armas, armas que nunca había visto, estaba confundida hasta que escucho un grito, un grito que conocía bastante bien.

—¡Tia Evelyn!—Era Eleanor, estaba asustada, no paraba de llorar y en cuanto la vio se lanzo a sus brazos—¡Yo estaba en el bar y de la nada… de la nada empezaron a dis, disparar, tuve mucho miedo creí que iba a morir!—Hablaba a la par que lloraba y sollozaba en los brazos de su tía.

—Ya tranquila mi amor, ya pasó, no tengas miedo, recuerda, yo nunca dejare que te pase algo—Evelyn consolaba a Eleanor

—(Con que esa niña le importa, ya se de dónde ahorcar para que se ponga a ralla, esa niña será la pieza clave en mi juego)—Beckett kas veía a ambas fijamente.

—Evelyn, le dijo a Eleanor que la esperara en lo que ella hablaba con el sheriff.—Beckett puedes entrar a la oficina.

—Beckett estaba pensativo, pero le hizo caso—Escúchame bien estúpida aquí yo pongo las reglas así que si es hora de que recuerdes tu—Evelyn lo tomo del cuello y lo azotó la silla.

—¡No escúchame bien maldito anciano desgraciado, alejate de mi niña, ¿Oíste?, dónde crees que estube hoy, si la respuesta es emborrachándome, estás equivocado, te investigue, y se que te gusta jugar muy sucio, pero creeme yo también se jugar sucio, es más yo nací en la suciedad asi que si le pones un solo dedo a mi pequeña, te voy a cortar los huevos!

—Evelyn salió de la habitación para ir de nuevo a la callé, ahí estaba Eleanor esperándola, ambas subieron al caballo de Evelyn y se fueron a su hogar, lentamente mientras se alejaba Beckett las veía curioso.

Ambas llegaron a las afueras del pueblo para descansar en su hogar, Eleanor se fue a dormir, sin embargo Evelyn solamente se sentó en la mesa viendo a el retrato de esta Sarah, ella estaba bastante pensativa, Eleanor estuvo en peligro y ella no estaba ahí para protegerla, ella se iba a ir a dormir pero de último momento decidió regresar a la mesa y tomar el retrato de su hermana.

Evelyn lo vio, lo acaricio e incluso se disculpó, aclarando que tenía algo que hacer, entonces Evelyn azota el retrato contra la mesa destrozando el cristal y el marco, ella quita la foto de su hermana cuidadosamente, enmedio de la foto y la madera del marco había unas 3 llaves.

Evelyn salió de su casa en medio de la noche toma una pala, ella fue a la tumba de su hermana, después comenzó a excavar el lugar de descanso de Sarah, una vez que el féretro estaba expuesto ella lo abrió, pero lejos de estar los restos de Sarah, hay 3 cajas ella toma la de la derecha, lista para guardar las otras 2 cajas, esta se arrepiente y toma todas las cajas pará después cerrar la tumba.

Evelyn abrió la caja que tenía, diciendo, “hola mis viejos amigos, está será la última vez que los use creo”

Ahí había un rifle de palanca, tres lazos, uno de cuero, y dos de fibra, un gancho, encendedor, un me, mapa, brújula y pólvora mucha pólvora, Evelyn pasa toda la noche confeccionando ciertas partes de el uniforme hasta que termina.