Blue » Harry Styles

«Capítulo cinco»

En la tarde, luego de que terminará el día escolar, Mackenzie se dirigió al hospital donde se encontraba internada su madre; al llegar la encontró dormida más eso no la llevo a retirarse, sino que espero a que ella despertará.

La suerte iba de su lado por lo que su madre se despertó tres veces durante las cuatro horas que había durado su visita; charlaron animadamente durante las veces que había despertado, poco antes de retirarse Grint había decidido tener una charla con el médico que atendía a su madre, más esta charla tuvo los mismos resultado de siempre: el panorama menos alentador que podía existir.

Al encontrarse en la entrada del hospital, iba a dirigirse a su hogar, pero recordó que gracias Jake: había quedado más insegura que nunca, por lo que fue acogida en la casa de Harry Styles. Camino alrededor de media hora hasta encontrarse frente a la puerta de los Styles, toco el pedazo de madera pensando que alguien se encontraría en el primer piso de la casa.

Al pasar unos diez minutos, como nadie la atendía decidió que era mejor tocar el timbre, pero parecía como si nadie estuviera en la morada; así que decidió tomar asiento en las escaleras de la entrada, pero recordó la entrada de la cocina, así que volvió a ponerse de pie y camino hacia el patio trasero de la casa y encontrando la grata sorpresa que la puerta se encontraba abierta.

Entro en la cocina y su estómago hizo un sonido con el que pedía comida, así que con temor (al no ser esa su casa) pero para detener aquel sonido, abrió rápidamente la nevera y saco de esta una manzana como también saco la jarra llena de agua.

Tomo asiento en la mesa de la cocina mientras llenaba su estómago con la fruta que había lavado hace pocos minutos, terminada aquella manzana se lavó las manos rápidamente y botando en la basura los restos de la manzana; se encargó de lavar y volver a guardar el vaso que había utilizado.

Volvió a sentarse en el sitio que había ocupado mientras comía, a los pocos minutos empezó a escuchar algo más ese algo no era precisamente música, sino gemidos. Mackenzie bufó y se dispuso a salir de la casa, verificando antes si llevaba dinero consigo, ya que había decidido ir a un McDonald's para esperar que a Harry se le bajará la calentura después de saciar sus necesidades.

Más una duda empezó a rondar por su mente: « ¿Qué se sentiría interrumpir a Harry y Karissa? »

Negó con la cabeza mientras empezaba a reírse de aquella ocurrencia que había venido a su mente.

Ew, Mackenzie.

Sería una pésima vista.

Asco.

Grint salió rápidamente de la casa Styles, pasada exactamente una hora y media, decidió que era hora de volver a la casa donde se hospedaría hasta que pudiera volver a la suya. Al momento en que estuvo cerca a la casa, se encontró con una imagen que no esperaba: Harry despidiéndose de su rubia novia con un beso tan ¿apasionado? Que parecía que volverían a hacerlo por ¿segunda vez? En la calle.

Cuando estaba llegando vio a Harry despedirse de su rubia novia con un beso tan caliente que parecía que iban a hacerlo de nuevo en la calle. No se detuvo, y con la frente en alto fue a interrumpirlos. Al estar a menos de un metro carraspeo y tosió, falsamente, pero logro que la «parejita» se separará.

Harry fue el primero en hablar —: Hola lenta.

Iba a responderle, pero antes analizo el saludo de Styles.

«Hola lenta»

Esperen un minuto.

¿Me llamo lenta?