Cap. 6 "Adoro mis sueños"

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Domingo, 8:51 a.m.


Chase Roussel.


Que lindo día estoy teniendo, mucho trabajo, poco descanso, no he salido de mi oficina desde que llegué, y prácticamente tampoco he parado de corregir proyectos.

Definitivamente me la estoy pasando increíble, incluso mejor que Ethan, el cual está muy relajado en su departamento haciendo quién sabe qué (nótese el sarcasmo).

Ethan definitivamente sabe cómo complicarme el día. Ayer me dejó todos sus trabajos pendientes, mas los míos, un castigo por referirme a el en femenino.

Con Ethan no se puede jugar...

Ayer no me dió tiempo de revisar todo, así que dejé algunos para hoy, y resulta que mi mejor amigo me mandó mas trabajos y documentos, y estoy asta el tope, mi escritorio es un desastre, hay varias pilas de papeles sobre el mismo, y mi mail también está lleno de ellos.

Un día de estos Ethan me va a matar de tanto trabajo, ademas creo que me está empezando a doler un poco la cabeza.

Me recargo en el respaldo de la silla y suelto un suspiro cansino, cierro los ojos, me mantengo así por unos dos minutos.

Al sentirme un poco mas relajado, llamo a mi secretaria y le pido que me traiga una pastilla para el dolor de cabeza.

Al cabo de un rato me la trae, junto con una botella de agua, me la tomo. Decido descansar unos minutos mas, y al cumplir con mi corto descanso vuelvo al trabajo.

Dos trabajos bien revisados después, siento una mirada sobre mí, y al levantar la vista me encontré con unos bellísimos ojos grises.

Me quedo apreciando a la dueña de esos ojos, tiene un cabello del sueño, con un color castaño muy claro, sus brillantes ojos grises, trae un vestido, o eso es lo que alcanzo a ver desde aquí, es un poco sencillo, pero elegante, nada como para llamar mucho la atención.

Noto que trae a un hombre de seguridad a unos pocos pasos de distancia de ella.

Creo que ya he visto a esta mujer antes, ¿Pero dónde? Luego de echar cabeza por unos segundos ella comienza a caminar lento, y entonces la recuerdo, y al hacerlo se me sale una sonrisa ladina.

No lo puedo creer, pero si es la mismísima modelo estrella, Lys Blanc. Joder, está buenísima, y aún mas en persona.

Si Ethan estuviera aquí ma abría dado un golpe en la cabeza por andar pensando cosas sucias. Aunque soñar no es malo, pero si vieran mis sueños, tendría prohibido hacerlo.

Adoro mis sueños.

En fin, dejé de verla y me concentré en mi trabajo, sin quitar la sonrisa, no planeo dejar nada para mañana, terminaré todo esto hoy, aunque me cueste la vida.

Aunque para no exagerar tanto, por lo menos aunque me cueste el almuerzo.

No, definitivamente prefiero perder la vida antes que el almuerzo. No espera, si pierdo la vida entonces perderé el almuerzo también.

Rayos, definitivamente esta decisión es difícil.

Ethan seguramente tendría una respuesta.

Lys Blanc.


Entro lentamente a la oficina del señor Leroy, y me encuentro con un hombre que aparenta los cuarenta años, se nota que se conserva muy bien, inclusive mi padre se ve mas viejo que él.

Digno De Ser Llamado El ReyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora