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Oswald miraba por la ventana, tratando de reconocer el camino

Esto era un secuestro, ¿Verdad?

¿A dónde lo llevaría? ¿Qué tendría que hacer?

Miraba el camino para intentar memorizarlo y escapar cuando tuviera oportunidad. Pero para su sorpresa, no tuvo que hacer nada de eso al estacionarse frente a su casa

--¿Mi casa? ¿Cómo sabes dónde vivo? .-su voz se quedó en su garganta al ver al conejo bajar del auto y dirigirse hacia donde estaba él

Esperaba lo peor, cerró los ojos y se cubrió con sus manos, pero el conejo no le hizo daño y simplemente le quitó el cinturón para después cargarlo y llevárselo dentro de la casa

Oswald volvió a sentir otra oleada de miedo al recordar que su madre estaba trabajando y que él estaría solo con el monstruo

¿Qué debería hacer? ¿Debería gritar para alertar a los vecinos? ¿Ellos podrían ayudar?

No. No lo harían, ni siquiera ayudaban cuando su padre los...

Sus pensamientos fueron interrumpidos cuando escuchó el sonido de la puerta abriéndose. Su gata mascota los vió, erizó su pelaje, dándoles un siseo en amenaza antes de salir corriendo

Oswald se sintió muy solo, sintió que no había nadie que le pudiera ayudar; un sentimiento que ya era algo normal en su vida, pero que en ese momento era más fuerte que nunca

--¿Q-Qué vas a hacerme? Por favor, no me hagas daño .-suplicó mientras las lágrimas salían de sus ojos

El conejo no contestó y fue directo al botiquín de emergencia que su madre siempre ponía cerca de la entrada

"¿El botiquín? ¿Qué planea hacer?"

La criatura tomó el botiquín, fue a la sala donde sentó a Oswald en el sillón, después tomó uno de sus brazos y subió una de las mangas largas de la camisa del niño dejando ver los moretones y heridas que Oswald había intentado ocultar

Algunas marcas ya eran de hace dias

El conejo pareció tornarse pensativo, después suspiró y preparó un poco de agua oxigenada en un algodón

--¿Q-Qué vas a hacer? .-preguntó alarmado antes de que el algodón tocara su piel

Oswald esperó sentir dolor como normalmente sucedía, pero está vez se sorprendió al sentir el cuidado que la criatura usaba al sanar sus heridas. Aún había dolor, pero este era mínimo, no lo sujetaba con fuerza ni le gritaba que se mantuviera quieto, hacia movimientos pequeños y precisos, teniendo cuidado de no lastimarlo

Solo su madre le daba ese cuidado

El conejo siguió con el resto de su cuerpo, poniéndole venditas donde lo necesitaba y poniéndole pomadas a algunos golpes que el bully de su escuela le hizo

Cuando el conejo terminó, agarró una paleta que su madre ponia en el botiquín y se la extendió. Oswald sabía que no era bueno aceptar dulces de extraños, pero tenía demasiado miedo de rechazarlo que simplemente lo aceptó

La criatura amarilla pareció satisfecha, agarró el botiquín y lo llevó de nuevo a su lugar en la entrada de la casa. Oswald aprovechó esto para poder salir de la situación

--E-Estaré en mi cuarto, no voy a intentar escapar, solo estaré en mi cuarto .-el conejo lo miró tranquilamente y sin decir nada

El niño corrió hacia su habitación y cerró la puerta con pestillo para sentirse a salvo. Oyó un ruido debajo de su cama, se asomó y vió allí a su gata escondida y con las orejas atrás

--Hola, tranquila .-dijo metiéndose debajo de su cama con ella.- Voy a llamar a mamá para que ella nos ayude

Pero... ¿Realmente podrá ayudar? Ella no era tan fuerte... Pero quizás pueda hacer algo

Rápidamente le mandó un mensaje

"Mamá. Algo le pasó a papá, por favor, ven rápido"

Oswald se recargó en el piso y esperó

(...)

El niño abrió los ojos horas después, una voz le llamaba

--¿Bebé? .-alarmado volteó solo para ver la cara de su madre quien se había agachado para buscarlo

--¿Mamá?

--¿Qué estás haciendo allí? Sal

--¡Mamá! .-exclamó saliendo de debajo de la cama.- Algo le pasó a papá

--Oswald, ya revisé a tu padre y parece estar bien

--¿Si?

--Si. Ahora mismo está viendo televisión en la sala

¿Televisión? ¿Será que todo fue un sueño?

--Oh .-dijo tranquilizandose

Sintió como su madre empezaba a inspeccionarlo, acariciando sus heridas por encima de las pequeñas vendas

--¿Tu padre hizo esto? .-preguntó refiriéndose a las vendas

--Eh.. .-no supo que responder

--¿Te dolió? Él suele ser brusco contigo a veces

--No. No dolió casi nada

Su madre sonrió, se veía tan cansada. Ella también usaba ropa de manga larga

--¿Te lastimó? .-Oswald negó, eso pareció aliviarla.- Parece estar de buen humor, así que no hagamos nada para enojarlo, ¿Ok?

--Si mamá .-ella se acercó y besó su frente

--Ese es mi muchacho .-buscó algo en su bolsa, sacó un pan dulce y se lo dió.- Puedes comer esto ahorita aquí en tu cuarto, pero que tú padre no se entere o se enojara otra vez. Yo no cenaré, así que puedes dormir una vez termines de comer esto

Oswald asintió

--Gracias mamá

Su madre se retiró de su habitación, el niño suspiró aliviado antes de comer el pan que su madre le había dado

Parece que todo era un sueño, una pesadilla, pero aún asi se sentía cansado, así que cuando terminó de comer tiró la envoltura de plástico que cubría el pan en su pequeñó contenedor de basura y se recostó a dormir

Cerró los ojos y deseó tener dulces sueños

Continuará...

Continuará

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Él No Es Mi Padre  -Into the PitDonde viven las historias. Descúbrelo ahora