3. Saga Cree en mí - Heavy Crown

Dieciocho."¿Has vuelto al negocio?

Dejé a Alexa en el sofá y fui a ayudar a Alice, que estaba intentando bajar las escaleras con las muletas.

- Yo puedo, papá - me miró enfadada.

- No quiero más accidentes. - la cogí y bajé las escaleras con ella.

- Odio que hagas eso - dijo mi hija adolescente enfadada. - Yo puedo valerme por mi misma.

- Claro que sí.

Fui al salón donde Alexa estaba sentada en el sofá mirando sus manos. Solo quería golpearme por todo esto. Tenía que irme de aquí.

- ¿Que te ha pasado? ¿Estás bien? - preguntó Alice mirando a Alexa.

- Estoy bien - sonrió esta cálidamente. Alice se sentó y la miré. Tenía que ponerla a salvo y no sabía cómo.

- Te quedarás aquí hasta que me vaya. Aunque no entiendo porqué ellos te golpearon para que te.... Espera, a ellos... quien te refieres?

- Los "amigos" de mi ex-marido. Ellos van detrás de ti, también saben que hay una banda que va detrás de ti.

- ¿Una banda?

Alexa asintió - Lo dijeron mientras me acorralaban.

- Quiero ir a ver a Austin, ya estará en su casa.

- Nena, ahora no.

- Quiero ir a verlo ya. - Alice se levantó y apoyó el pie con el esguince en el suelo. - Esto ya no me duele, es una tontería seguir teniéndolo vendado. Fue a quitarse la venda pero la detuve.

- ¿Que estás haciendo?

- Me siento inútil, voy a conducir con tu coche a casa de Austin.

- Ni de broma, Alice Marie Bieber. - cogí su muñeca. Mi hija me miró desafiante y me entraron ganas de encerrarla en el desván con sus amigas las cucarachas y no dejarla salir hasta que nos fuéramos. - Te llevaré yo. Quédate aquí y cierra la puerta. No tardaré - le dije a Alexa. Ella asintió.

Alice se dirigió a la salida sin las muletas y las cogí gruñendo en voz baja. Alice salió y la seguí. - Utiliza las muletas - se las di. Ella las cogió y se dirigió al asiento del copiloto. Me monté y esperé a que ella se sentara bien.

- ¿Que banda nos persigue? - me preguntó.

- No lo sé.

¿Qué banda podría perseguirnos? Los Skinhead ya estaban más que olvidados y yo no había hecho nada para que alguna banda nos persiguiera. Para mi, ese pasado estaba enterrado, aunque al parecer no tanto. Yo ya había desaparecido del mapa, había borrado mi huella, aunque al parecer no para alguien.

Dejé a Alice en esa casa sin fiarme, a pesar de sus palabras tranquilizadoras. La vi entrar y me fui. Marqué el número de Cody y su voz resonó por todo el coche.

- ¿Qué ocurre?

- Una banda me está persiguiendo.

- ¿Una banda?

- Si, sabíamos que todo lo que ha pasado sería por eso.

- ¿Has vuelto al negocio? - me preguntó Cody.

- Esa pregunta ofende. Jamás volvería al negocio después de lo de Aria.Aprendí.

- Entonces no lo entiendo. ¿Quién querría hacerte daño? ¿Los Skinhead, quizás?

- ¿LosSkinhead? - escuché la voz alarmada de Jennifer por detrás. - ¿Han vuelto?

- No, cariño.