- Capítulo 8 -

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Isabella

Desde ese día que salí de su oficina con un mar de emociones no la he visto y ya han pasado dos semanas, sé que tiene otros negocios, pero se me hace raro que no muestre alguna señal de vida.

-Me impresiona el avance que han tenido los cocineros, tenías razón al estar haciendo rotativos los puestos.

-Sí, así aprendí más técnicas en uno de mis trabajos y este lugar lo tiene todo para ser el mejor de la ciudad entonces hay que explotar ese potencial. - terminamos de llenar los últimos reportes del inventario y nos despedimos.

En las últimas dos semanas he podido tomar el control de la cocina con total libertad sin que alguien me esté contradiciendo. Dafne me ha hecho sus observaciones y lo agradezco ya que no todo siempre es de color rosa. Ha sido una buena compañera y amiga.

Siempre he pensado que muchas veces estamos más tiempo en el trabajo que en la casa, así que las personas con las que convives en el trabajo se pueden volver tu familia.

-Nos vemos, mañana y tú - señala a la otra persona que aún sigue en la cocina - No quemes la cocina o sino Amber nos matará a todos.

-Yo lo vigilaré, no te preocupes.

Desde hace dos semanas Luc se ha acercado a mí, pero no de una manera romántica sino como amigo, al inicio se notaba lo avergonzado que estaba por la actitud de Amber, pero le aclaré que lo que ella haga no tiene que ver con él, a partir de ahí comenzamos a llevarnos mejor.

Él siguió viniendo al restaurante por las tardes y me pidió que le enseñara a hacer postres. No entendía porque no le pedía a Dafne lo mismo, pero luego comprendí el por qué, ya que el novio de Dafne es el hombre que me estuvo persiguiendo y que claramente no se lleva bien con Luc.

-¿Por qué te gusta hacer postres? - me coloco a lado de él.

-Me gustan los postres y Amber dice que no puedo comer muchos, así que si hago los míos no me podrá decir nada ¿No?

-Hablando de ella - me ve de reojo mientras continúa haciendo la mezcla - ¿Has sabido algo de ella?

-Algo así. No ha querido responder mis llamadas, pero sé que se fue de vacaciones, por una parte me siento feliz por ella ya que no ha tenido un descanso en mucho tiempo - levanta la mirada y mis ojos se conectan con los suyos - ¿Por qué la pregunta? ¿Te hace falta esa malhumorada que te desautoriza frente a todos? - evito su mirada, pero no puedo evitar sonrojarme.

-Curiosidad. - me encojo de hombros - Espero que le guste los cambios que se hicieron. La última vez que hablamos no fue muy agradable.

Continuamos con la lección del día, en lo que Luc termina de decorar su postre yo intento estudiar sobre el pan que quería hacer el día que conocí a Amber y que no he podido hacer; digo intento porque la verdad no dejaba de pensar en que se había ido sin decir nada.

El sonido de mi celular me saca de mis pensamientos y vuelvo a bloquear otra vez el número de él. ¿No entiende que no quiero tener nada que ver con él?

-¿Es tu ex? - dice sin dejar de cortar las fresas.

-¿Eh?

-Que si es tu ex. Me he dado cuenta de que ese número siempre te marca a esta hora y siempre eliges ignorar la llamada, así que me hace pensar que no quieres hablar con él. - suspira - Si te está molestando bloquea su número o dime y me encargo personalmente.

-No te preocupes por mí, Luc. Lo tengo bajo control, sé que si pasa algo puedo contar contigo ¿No? - asiente sonriendo.

-Terminé - dice orgulloso y me acerco a donde está él.

Traición en las sombrasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora