Narrador: Omnisciente
Parte 2Los días se habían convertido en semanas, las semanas en meses, y los meses en años. Dalai decidió continuar con su vida, pero siempre con la sombra de Li Min en su corazón. Se graduó, consiguió un trabajo y trató de seguir adelante, pero el vacío que ella dejó nunca se llenó por completo.
Pasaron seis años desde que Dalai no volvió a ver a Li Min, seis años donde la buscó en cada rincón pensando que realmente seguía allí, se negó a pensar que en serio se había ido sin siquiera decir adiós. Dalai estuvo los últimos seis años esperando de Li Min de quien estuvo profundamente enamorado, no obstante, habían pasado los años por ende los sentimientos de Dalai desaparecían poco a poco, decidió rendirse y no buscarla nunca más. Su amistad había sido el pilar de su juventud, un refugio en medio de las tormentas de la adolescencia que habían vivido con muchas alegrías y emociones. Aquel día, en el que sin previo aviso, la familia de Li Min decidió mudarse, llevándola lejos de su lado.
Pero un hecho paso una tarde, mientras caminaba por el parque donde solían pasar horas juntos, Dalai vio una silueta familiar a lo lejos. Su corazón dio un vuelco. ¿Podría ser ella? Eran tan similares que no pudo evitar que su corazón diera un vuelco de emoción. Aquella figura se movía con la misma gracia que recordaba, y su cabello negro ondeaba al viento de una manera inconfundible. "Es ella" pensó Dalai, seguro de sus pensamientos, decidió ir tras ella.
Dalai comenzó a seguirla, su mente inundada de recuerdos y emociones. Aceleró el paso, tratando de alcanzarla, pero la multitud del parque parecía conspirar en su contra. La figura se desvaneció entre la gente, y Dalai se quedó solo, con la duda quemándole el alma. ¿Realmente era Li Min? ¿O solo un espejismo creado por su anhelo? Su corazón ha vuelto a romperse como aquel día hace seis años, su mente dolía de tantos recuerdos, su corazón se sintió decepcionado ¿Fue mi mente la que me ha traicionado? ¿Por qué traerme estos recuerdos nuevamente?
El eco del pasado resonaba en su mente mientras se quedaba parado, mirando al horizonte. Todo esto había sido una busqueda sin respuesta, un Dalai cabizbajo decidió regresar a casa, pensó que tanto trabajo sin descanso le había afectado.
Esa misma noche, Dalai en su casa se acostó después de cenar mientras que en sus pensamientos seguía esa silueta tan familiar, su corazón le decía que esa era Li Min pero su mente le decía que no se engañará de esa manera, que ella se había ido y no volvería nunca más, los recuerdos de las tantas veces que converso con Li Min regresaron a su mente.
"¡Dalai, levántate que llegarás tarde!-Cito aquella voz familiar-Me iré a la escuela sin ti.
Ya me voy a levantar, solo cinco minutos más-pedí en susurros.
¡Dalai, corre que tenemos exámen hoy!-esta vez eran gritos cerca de su oído.
Enana, ¿podrías dejarme en paz? Igual si llego tarde me irá bien en ese exámen-Decía somnoliento.
Dalai, vuelve a decirme enana y probablemente no vivirás para contarlo-Li Min enojada, decidió empujar a Dalai de su cama haciéndolo caer al suelo.
¡Auch! Ok, ok, ¡ya entendí, ya voy Li Min!-Gritó adolorido, por su bien decidió vestirse para ir con ella y seguir viviendo.
De camino a la escuela, ambos iban riendo y diciéndo tonterías hasta que Li Min puso una expresión totalmente seria.
¿Qué pasa? ¿Sucede algo, Li?-Angustiado de que hubiera algún problema, realmente Dalai siempre estaba preocupado por Li Min.
¿Alguna vez te pusiste a pensar lo que haremos en el futuro?-Solto Li Min sin más, Dalai la veía confundida.
¿A qué te refieres?-Un Dalai confundido quería saber qué traía ella en mente.
Me refiero, después de la escuela y todos los estudios ¿Qué harás? Yo quiero seguir mi sueño de ser diseñadora de modas, aún no estoy muy segura de si conseguiré un trabajo con eso pero sé que me gusta-Li Min emocionada, contaba con gran entusiasmo lo que algún día le gustaría ser.
Yo probablemente trabaje sin poder descansar ni un día, aunque sería divertido ser nadador profesional-Dalai contesto de forma realista, siempre tuvo expectativas muy bajas sobre su futuro, a pesar de ser un chico muy listo él vivía en la realidad competitiva que tenían los adultos, sabía lo difícil que sería cumplir su sueño así que directamente se rindió antes de siquiera intentarlo.
¡Oye, no digas eso!-citó Li Min, enojada-no quiero que trabajes tanto ¿Se entiende?
¿Por qué no? Digo, tendremos que trabajar mucho cuando seamos adultos-Dalai miraba confundido a su pequeña amiga.
¿Realmente no quieres cumplir tu sueño, Dalai? Además, no quiero que te rindas así de fácil-Li Min miraba a su mejor amigo, insistiendo en sus sueños-Prométeme una cosa.
Ok, ¿Qué quieres que prometa? Dímelo-Contesto sonriente, esa era una de las cosas que Dalai amaba de ella, siempre era soñadora y optimista.
Promete que tratarás de cumplir tú sueño, aunque sea muy difícil- Una seria Li Min insistía en que su mejor amigo no debía renegarse a lo que ama- También, ¡debes prometer que sin importar qué tendrás tus días de descanso en tus trabajos! Te conozco, Dalai, no querrás descansar ni un poco.
Pero-Trato de decir algo pero ella lo interrumpió.
Pero nada, prometelo Dai-Dijo ese apodo que le había colocado cuando eran más pequeños, era lo último que Dalai necesitaba para sonreír y decir sin dudar.
Lo prometo, Li."
Ha pasado tanto desde esa promesa, el corazón de Dalai parecía que hubiera sido apuñalado con una daga con ese amargo recuerdo.
No pude cumplir mi promesa, Li-Pensó Dalai antes de caer en brazos de Morfeo.
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Trazos de vida
RandomRelatos efímeros y experiencias que vienen de mi imaginación. Pueden ser con final trágico, quizás feliz pero con un poco de suspenso, probablemente terror.